(Por: Rafael Dupouy Gómez)
Fotografía de don Francisco Baquero Luque en su casa con José González Marín en 1948 y dedicatoria de éste, desde Caracas, Venezuela, en 1950 que reza: "A Paco Baquero con un abrazo de su mejor amigo, González Marín". (Archivo: Francisco Baquero Luque).
Comparto en esta oportunidad con mis amables lectores un magnífico
relato testimonial del muy querido amigo don Francisco Baquero Luque, sobre una
inolvidable experiencia en compañía de su entrañable amigo don José González
Marín, el más grande rapsoda español de todos los tiempos, famoso recitador de
extraordinarios poemas, quien vino en sus giras por América demostrando todo su
sentir y arte exquisito.
En Venezuela, en el año 1932, le pudo admirar mi bisabuelo, el General
Juan Vicente Gómez, Presidente de la República en el Teatro Nacional de Caracas
y desde esa época, mi abuelo Florencio Gómez Núñez, cultivó una entrañable
amistad con él, hasta en Madrid, España, cuando fue invitado cordialmente por
el rapsoda a un recital con Pastora Imperio, donde le presentó, personalmente,
al célebre poeta y dramaturgo Federico García Lorca en 1936.
Con el paso del tiempo, se reencontraron nuevamente en Caracas en el año
1952, durante una de sus presentaciones y el buen amigo Pepe González Marín, les
dedicó un sentido y cariñoso autógrafo a los hermanos Gómez Núñez.
Cariñosa
dedicatoria del famoso recitador español que dice: "A Juan Vicente y Florencio Gómez en recuerdo de una
gran amistad, que empezó por el respeto a su difunto padre y que en la
actualidad se fue acrecentando porque sus raíces fueron sinceras. Con todo el
verdadero afecto de este gran amante de Venezuela y con un abrazo", González Marín. Caracas, 12 de febrero de 1952.
(Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El difunto padre al que hace referencia el famoso recitador español José González Marín, es el Benemérito General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela, padre de Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez.
La interesante anécdota narrada con lujo de detalles por don Francisco Baquero Luque, gracias a su amable autorización, la comparto en este espacio que dedico al conocimiento de las historias taurinas de interés, ya que representa un valioso testimonio por su experiencia vivida con leyendas de la tauromaquia de una época irrepetible como lo fueron Manuel Rodríguez Sánchez "Manolete", don Álvaro Domecq, Rafael Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana", el "Ciclón" mexicano Carlos Arruza, Pepín Martín Vázquez y Pepe Luís Vázquez, importantes figuras representativas del toreo, quienes compartieron amistad con grandes artistas del teatro, la poesía, el cante y el flamenco.
RECUERDOS
SINGULARES
(Por:
Francisco Baquero Luque)
A mis entrañables amigos de Caracas (Venezuela) Don Rafael, Don Miguel y
familia Dupouy, este humilde recuerdo desde España.
A la izquierda: Disfrutando una corrida de toros, don José González Marín. A la derecha: El magnífico rejoneador don Álvaro Domecq y Díez, entrañable amigo del insigne rapsoda, uno de los recordados protagonistas de la anécdota descrita magistralmente por don Francisco Baquero Luque. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
Sobre mediados del mes de octubre, si mal no recuerdo, de 1947, tomando
una cerveza en el Bar Central de Cártama
con otros amigos y Pepe González Marín, éste me pidió que le acompañara como
asistente escénico, cual hacía con frecuencia, en un viaje que iba a hacer a
Jerez para inaugurar con un recital un
nuevo Teatro que iba a llamarse, Teatro Maravilla, (no sé si
existirá aún). De allí iríamos a Sevilla en donde tenía contratado dos
recitales en el Teatro San Fernando en
sesiones de tarde y noche.
Dos amigos comunes, Antonio Rodríguez Rodríguez y Enrique Marín
Rojas, mostraron deseos de venir a
presenciar los recitales de Sevilla quedando en que ellos se irían
directamente, como así fue.
A nuestra llegada a Jerez, nos esperaba don Álvaro Domecq para llevarnos
en su coche al Hotel donde pernoctamos Pepe González Marín y yo. A la mañana
siguiente, vino a recogernos en el Hotel, nuevamente, don Álvaro, con el que, mientras hacíamos hora para el
almuerzo en su casa, recorrimos las Bodegas de la familia, instalaciones
ganaderas, incluidos los picaderos de caballo de alta escuela de tiro de
carruajes de competiciones y, otros para caballos de rejoneo a lo que se
dedicaba don Álvaro desinteresadamente para mantener los centros de caridad
para niños que tenía a su cargo el caballero jerezano.
Nunca olvidaré aquel almuerzo en la casa de don Álvaro Domecq en la que
éste, su señora, Pepe González Marín y este humilde servidor, fuimos los
comensales; durante la comida y la sobremesa se habló de "Manolete",
¡cómo no!, de su muerte en Linares y de
sus relaciones con la actriz Lupe Sino, quien desde Lanjarón (Granada) en donde se encontraba, se trasladó urgente a Linares con la intención de casarse con "Manolete"
in artículo mortis y convertirse en su heredera, cosa que evitó sin ambages don
Álvaro, el mejor amigo que tuvo "Manolete" y con el que tanto alternó
en las plazas de España y América.
Ya en Sevilla, los cuatro amigos cartameños nos hospedamos en el Hotel Colón, en donde Pepe González
tenía, como siempre que iba por la ciudad del Betis, su base de operaciones y,
su "despacho" en un tresillo y mesita
en el hall.
Se llevaron a cabo las dos jornadas de recitales en el gran
Teatro hispalense, San Fernando, con actuaciones de tarde y noche con teatro a
rebosar siempre, y, es un detalle que recuerdo, con la asistencia a título
personal todas las tardes del Gobernador
Civil, entonces, Sr. Fernando Coca de la Piñera, entre otros muchos personajes
de relieve sevillanos (del pensamiento, poetas, cantantes, cantaores, toreros,
etc.), que recuerde: Manuel Machado, José Díaz de Quijano, José María Pemán,
Xandro Valerio, quien estrenó un poema a "Manolete", muerto en
Linares pocas semanas atrás. Lola Flores y Caracol, Juanita Reina (en el Hotel Colón hacía apartes con Pepe
González relacionados con la última secuencia recitada de "La Lola se va
a los puertos"), la incondicional de Pepe González, Pastora, hija de
la gran Pastora Imperio casada con "Gitanillo de Triana", también
presente, "Niño de Marchena", que siempre veía el recital tras los
telones, "Niña de los Peines" y su esposo, Pepe Pinto, y…, otro que
entonces conoció a nuestro artista y le otorgó, con su admiración, una patente
amistad, Carlos Arruza, al que llevaron al recital Pepín Martín Vázquez y Pepe Luís Vázquez y...un largo
rol que nos ocuparía excesivo espacio citar aquí, amén de que la memoria casi no alcanzaría a ello.
La noche que finalizaron los
recitales acudió al Hotel Colón un grupo de amigos del rapsoda que en el hall del mismo hicieron tertulia con él.
Tres leyendas del toreo a quienes conoció y recuerda en su ameno e interesante relato don Francisco Baquero Luque. De izquierda a derecha: El "Monstruo" cordobés Manuel Rodríguez Sánchez "Manolete", el "Ciclón" mexicano Carlos Arruza y Rafael Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana", compartiendo cartel. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
Recuerdo que me causó una enorme
impresión el torero "Gitanillo de Triana" (compadre de "Manolete"
que actuaba con él la tarde que el miura "Islero" acabó con su vida
en Linares) venciendo la pena se arrancó con unos cantes, a cuyos sones, su
propia esposa, Pastora, bailó con el
genio y el arte despabilado de forma genial. "De casta...".
Eran ya como las tres de la madrugada, cuando el maître del hotel se
acerca al grupo para decirle que un general del ejército que dormía a no mucha distancia en una habitación del mismo
hall les rogaba cesaran ya el jaleo, pues no podía dormir. Fue Arruza
quien, un poco sobrado de tequila con
soda, cometió la fatal indiscreción: "Maniiito, dile al generalito que
si no calla él le voy a banderilleaaaar". El silencio fue casi ominoso;
mis paisanos, Antonio Rodríguez y Enrique Marín que conmigo estaban sentados en
el mismo estrecho sofá, temblaban de miedo porque la cara y los gestos del
maître no barruntaban nada bonancible.
En efecto, no necesitó el maître llevar el recado: Una puerta que se
abre por una mano evidentemente airada y, un señor de cómo cincuenta años que
en batín y pijama, sable en mano, sale por ella hacia nosotros inquiriendo con
voz de general en mando cabreado: "¿Dónde está el pedazo de cabrón que
me va a banderillear...?". Pero..., de pronto, le interrumpe una voz en tono familiar: "¡¡Mi
generaaal !!, y, el ya teniente General, Asensio, que de él se trataba,
vuelve la mirada y reconoce a quien le llama, ya de pie hacia él: ¡Pero...,
si es Pepe González Marín; cómo he sentido no haber podido asistir a tus
recitales...! González Marín le
presentó a los concurrentes y, al llegar
a Arruza dijo en tono irónico: "El banderillero de mentirijillas y
enorme torero, Carlos Arruza...mexicano amigo de España, casado con una
sevillana para más españolidad…". Pepe González Marín añadió: "Mi general, estamos ahogando en
arte la pena que nos embarga por la muerte de nuestro amigo, "Manolete"
y, ahora me toca recitar el poema elegíaco que el poeta, Adriano del Valle ha compuesto en
honor de él y que acabo de estrenar aquí en Sevilla, le invito a escucharlo y,
mañana será otro día...". "Vale",
dijo el General, no esperaba yo terminar la noche de forma tan grata...". Velada, que se prolongó
hasta las claritas del día. Arruza prometió llevar un cirio a la Macarena de
Triana. Y según supe, se lo llevó; no era para menos….
Francisco Baquero Luque.
(Publicado, el miércoles, 31 de agosto de 2022).
Don Francisco Baquero Luque, eminente periodista, cronista, literato e intelectual cartameño de reconocida trayectoria.
Don Francisco Baquero Luque, nació en Cártama (Málaga), en 1931. Luego
de terminar sus estudios de Bachiller en Cabra (Córdoba) y Málaga, inició sus
estudios universitarios en Granada, que hubo de abandonar por circunstancias
familiares. Con clara vocación literaria, a los 17 años, ya escribía artículos
relacionados con el campo, publicando muchos de ellos, con cierta regularidad,
en las revistas de temario agrícola "Ceres y El Cultivador".
En 1968, encontró espacio en su actividad empresarial para iniciar
colaboraciones periodísticas en la prensa de Málaga, sobrepasando el millar de
artículos publicados en diferentes medios.
En 1998, escribió una de las partes de la trilogía "El Faraón de
los Decires". Es coautor de algunos trabajos históricos de carácter
comarcal como "Historias, Leyendas y Folclore en el Valle de Guadalhorce",
editado en el año 2000.
En 2010, publicó su gran obra "El Juglar y la Virgen
Peregrina" y en 2018, su interesante libro "Ecos de la
Alhóndiga", evocando sus recuerdos de niño, adolescente y joven en el
ambiente rural de su Cártama natal. Vida campesina en la ribera del
Guadalhorce.
Tengo la dicha de conservar, como oro en paño, dos de sus obras
literarias que me envió desde España con sus hermosas dedicatorias, "El
Juglar y la Virgen Peregrina" y "Ecos de la Alhóndiga". (Archivo:
Hnos. Dupouy Gómez).
A nuestro entrañable amigo, don Francisco Baquero Luque le
agradecemos su gentileza y amabilidad por habernos dedicado su excelente artículo, enviándole un fuerte abrazo con todo cariño desde Caracas,
Venezuela.
Rafael Dupouy Gómez
Pueden disfrutar el video "A la Memoria de Manolete", poema de Adriano del Valle, recitado por don José González Marín: