miércoles, 25 de junio de 2025

"NIÑO DE LA PALMA" EN EL CENTENARIO DE SU ALTERNATIVA

(Por: Rafael Dupouy Gómez)

Cayetano Ordóñez Aguilera "Niño de la Palma". (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Con motivo de cumplirse este año 2025, los centenarios de la alternativa y confirmación de alternativa de Cayetano Ordóñez Aguilera "Niño de la Palma", quiero recordar al iniciador de una larga e importante dinastía torera, con quien mi abuelo, Florencio Gómez Núñez, conservó una buena amistad con él y su familia.

Torero muy completo y fino, de corte clásico, rondeño. Con el capote lució ejecutando verónicas y vistosos remates como la media verónica, revolera y serpentina que eran auténticas obras de arte. Banderillero fácil. Con la muleta, destacaban sus naturales, pases por alto y de pecho, con naturalidad y gran valor. De extensa variedad. Cuando dominaba a su enemigo, acariciaba sonreído el pitón, en un temerario desplante. Ejecutando la suerte suprema, destacaron sus formidables estocadas recibiendo. Fue un matador de toros completo, hábil e inteligente, del que se esperaba mucho y al que quizás le faltaron mayores deseos de triunfo.

En ocasiones, se le veía algo apático. Los públicos se dividían entre admiradores y aquellos que le criticaban, esperando más de él.   

Fue líder del escalafón en 1926, con 78 corridas; y en 1927, con 65 corridas.

Dos imágenes muy toreras de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", vestido de luces y de civil con sombrero cordobés. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

Cayetano Ordóñez Aguilera nació en Ronda, el 4 de enero de 1904. Fue hijo de padre carabinero retirado, quien regentó una zapatería con el nombre de "La Palma", de donde tomaría su apodo como torero. A los 13 años de edad, junto a su familia tuvieron que establecerse en La Línea de la Concepción, Cádiz. Sin antecedentes taurinos, en Ceuta, se arrojó al ruedo y fue detenido por la Guardia Civil.

El 5 de octubre de 1918, en La Línea de la Concepción, vistió por primera vez el traje de luces, en un festejo humorístico.

Contrajo matrimonio en 1920, con María Consuelo Araujo de los Reyes (1904-1978), conocida en el mundo artístico como "Consuelo Reyes", siendo cantante y actriz. Rodó tres películas: "La Reina Mora" (1922), "Don Quintín el Amargao" (1925) y "Cabrita que tira al monte" (1926). Los hermanos del "Niño de la Palma", Antonio y Rafael fueron novilleros.

El 14 de agosto de 1921, en Ceuta, figuró como sobresaliente, con Manuel Troyano "El Rubio" y Antonio del Moral "Mora", teniendo que encargarse del festejo taurino, ante la mala actuación de sus alternantes, logrando un gran éxito, saliendo a hombros de la plaza.

El 18 de septiembre de 1921, volvió a torear en la misma plaza con igual éxito, motivándole a encaminarse en la carrera como torero.

El 30 de abril de 1922, torea en la Península por primera vez, presentándose en Algeciras; y, el 15 de julio de 1922, en San Fernando, Cádiz. 

El 7 de junio de 1923, toreó en San Fernando, la corrida del Corpus Christi, logrando una gran actuación, que despertó la admiración de los aficionados. 

Vistosa y artística revolera de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

En la plaza de toros de Málaga, se presentó el 15 de junio de 1924, teniendo un gran éxito, repitiendo siete novilladas en ese coso el mismo año.

Allí, lidió una novillada de Miura, con buena fortuna, que le valió el verdadero reconocimiento de los aficionados. Luego, se presentó en Jerez, Baza, Ronda, Fuengirola, cosechando nuevos triunfos.

En la plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, donde debutó Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" exitosamente como novillero, el 4 de octubre de 1924, ante toros de Rufino Moreno Santamaría, cortó dos orejas y rabo, saliendo a hombros, alternando con Antonio Mesa "Mesita" y Joaquín Rodríguez "Cagancho".

En la plaza de toros Monumental de Valencia, España, se presentó por primera vez, el 19 de octubre de 1924, repitiendo el 9 de noviembre de 1924. Su última novillada la toreó en Melilla. El 21 de diciembre de 1924, actuó en un festival taurino en la Maestranza de Sevilla, compartiendo cartel con el rejoneador don Antonio Cañero, Ignacio Sánchez Mejías, Pepe Algabeño, Manuel Báez "Litri" y José "Pepito" Belmonte. En el mes de diciembre, le ofrecieron un banquete en Málaga.

Esa temporada, en "Toros y Toreros", se dijo de él: "Es el fenómeno del año". Toreó unas 24 novilladas.

Escribió "Juanito" en la crónica taurina de "La Unión Ilustrada": "No desconoce ni una sola de las suertes taurinas y las ejecuta con "demasiada" facilidad. Demasiada, porque como el inolvidable Gallito, no da la sensación del peligro, y el capote y las banderillas y la muleta parecen en sus manos cosa de tan fácil manejo, que cualquier espectador sería capaz de llevar a cabo las faenas que se ven al lidiador. La difícil facilidad de que se hallan exentos los toreros actuales, parece resurgir en la persona del Niño de La Palma, verdadera esperanza del año 1925". Su apoderado era Luis Serrano Álvarez.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" toreando al natural. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El 10 de mayo de 1925, publicó A. García, en la "La Unión Ilustrada", un artículo titulado "Las grandes figuras del toreo: Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", expresando lo siguiente: "Cayetano posee lo de las grandes figuras: Arte, Maestría, Valor y Figura. Huelga reseñar la corrida de Valencia y la siguiente. Sólo diré que fue tanto el entusiasmo que este diestro me hiciera despertar, que ya dispuesto para regresar a Madrid, me enteré de que el día 26 toreaba en Castellón con Pepito Iglesias y Torerito de Málaga con toros de Santa Coloma y sin reparar en nada, decidí él trasladarme a Castellón. ¡Señores qué corrida! ¡Qué de cosas hizo el Niño de la Palma! El público de pié lo aclamaba y las ovaciones se sucedieron. Fue una tarde que no se va de la memoria nunca. La fiesta Nacional ya tiene el torero que le faltaba. Quisiera describir esta corrida, pero el poco espacio que tengo reservado me lo impide y solo diré que con el capote estuvo colosal; con la muleta insuperable y con el acero recordando al infortunado Varelito. Al marchar de Castellón de regreso para Valencia, en el tren no se hablaba de otra cosa que del éxito del Niño de la Palma".

La temporada de 1925 "Niño de la Palma" toreó 20 novilladas. Inició en Melilla, el 1 de febrero, repitiendo el 15 de febrero. Se presentó en Barcelona, el 1 de marzo, saliendo herido con una cornada en el muslo izquierdo, al realizar su segundo lance con el capote. Reapareció, en Valencia, el 22 de marzo de 1925. Se presentó en Alicante, Granada, Valencia, Castellón, Sevilla, el Puerto de Santa María, Ronda, Madrid, Córdoba y Huelva, donde toreó su última novillada, antes de tomar la alternativa.

Dos portadas de revistas taurinas con las imágenes de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" a quien catalogaron como "El Coloso de Ronda". (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

"ES DE RONDA Y SE LLAMA CAYETANO"

El jueves, 28 de mayo de 1925, debutó en la plaza de toros de Madrid, en una novillada de desecho de tienta y defectuosos, de la ganadería de don Emilio Campos Varela, de Sevilla, en compañía de Fernández Prieto y Ramiro Anlló "Nacional Chico". Había gran expectación por ver torear a "Niño de la Palma" en su debut. Se anunció el "No hay Billetes" días previos a su presentación. La impresión de la crítica y los aficionados es que sabe bastante la asignatura, a pesar del poco juego de los novillos que les tocó lidiar. Con la capa demostró gran soltura, al igual que con la muleta. Con el estoque, no estuvo a la altura.

En el diario "ABC", el 28 de mayo de 1925, publicaron el artículo "Es de Ronda y se llama Cayetano", escrito por Gregorio Corrochano.

En el diario "El Liberal", el 29 de mayo de 1925, publicaron la crónica taurina escrita por César Jalón "Clarito", "Se llama Cayetano…y dicen que es de Ronda" (Ligero estudio del Niño de la Palma en la tarde de su presentación).

Hermosa revolera de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en la Maestranza de Sevilla. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El 31 de mayo de 1925, en Alicante, reapareció Juan Belmonte, junto a Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", Antonio Márquez y Marcial Lalanda. Fue una gran corrida donde Belmonte y Márquez cortaron orejas.

Ese año, en Ronda, se inauguró el Club Taurino "Cayetano Ordóñez Niño de la Palma".

El 5 de junio de 1925, hizo su segunda presentación el "Niño de la Palma", en Madrid. La plaza estuvo completamente llena. Se lidiaron reses de D. José Bueno y de García Pedrajas, alternando con Francisco Tamarit "Chaves" y Pepito Belmonte, hermano de Juan. El "Niño de la Palma" consiguió muchos aplausos, principalmente en su primero, al que mató de una estocada recibiendo. En la lidia de su último toro fue enganchado al torear con la muleta, resultando con un fuerte varetazo en el muslo derecho. Dejó buena impresión, demostrando que se trata de un diestro que sabe torear.

SU ALTERNATIVA

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" recibiendo la alternativa de manos de Juan Belmonte, el 11 de junio de 1925, en la Maestranza de Sevilla. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El 11 de junio de 1925, en la plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" tomó la alternativa, siendo su padrino Juan Belmonte, torero que admiraba y como testigo, Pepe "Algabeño", hijo.

Fue una corrida exitosa. Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" a un toro de la ganadería de don Félix Suárez, le cortó una oreja. Juan Belmonte cortó dos orejas y rabo y Pepe "Algabeño" hijo, una oreja.

Otra gráfica del histórico momento de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" recibiendo la alternativa de manos de Juan Belmonte, el 11 de junio de 1925, en la Maestranza de Sevilla. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

La crónica escrita por Pepe Casado "Españita" de "El Liberal" de Sevilla, señaló: "Se doctoró ayer, obteniendo nota de sobresaliente. A mi juicio, es la tarde más grande de torero que ha tenido en la plaza sevillana, sobre todo con el capote.

Cayetano Ordóñez rematando con una clásica media verónica en la Maestranza de Sevilla el día de su alternativa. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

La impresión que ha dejado Cayetano Ordóñez es la de que está bien doctorado, y que ya en el escalafón es uno de los de cincuenta corridas en adelante.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", torero completísimo, que sabe un rato de lo que es su arte, dará días de gloria a la fiesta nacional, a juzgar por la rapidísima carrera de aquel novillero que debutara con clamoroso éxito a primeros de noviembre del pasado año en la plaza sevillana, para recibir el espaldarazo nada menos que de Juan Belmonte en la corrida de la Prensa de 1925, con no menos éxito. Enhorabuena y que así sea".

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" toreando al natural el día de su alternativa en la Maestranza de Sevilla. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

Seguidamente, toreó en Bilbao, Badajoz, Murcia, Vicuña, el Puerto de Santa María, Pamplona y Madrid, donde confirmó su alternativa, en la corrida de la Prensa.

CONFIRMACIÓN DE SU ALTERNATIVA

El 16 de julio de 1925, Día de la Virgen del Carmen, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" confirmó su alternativa en la plaza de toros de Madrid, en la Corrida a Beneficio de la Asociación de la Prensa, de manos del mexicano Luis Freg, su padrino, y como testigos, Nicanor Villalta y Manuel Báez "El Litri", ante toros de Vicente Martínez y Esteban Hernández.

El mexicano Luis Freg, a quien llamaron "Don Valor" fue su padrino de confirmación, cediéndole el primer toro, de los herederos de don Vicente Martínez, llamado "Solimán", berrendo en negro.

Cayetano Ordóñez "Niño de a Palma" en la corrida de su confirmación de alternativa, en Madrid, donde estuvo muy bien. La Revista "La Lidia" lo tituló en su portada "Un torero cumbre". Fotos: Rodero y Almazán. (Archivo: Hnos Dupouy Gómez).

En su último toro, de Esteban Hernández, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" estuvo colosal, cortando una oreja al toro negro, de nombre "Querencioso". 

La Revista taurina "La Fiesta Brava", del año 1925, catalogó al "Niño de la Palma" como un torero cumbre, señalando lo siguiente:

"No le es necesario a un torero triunfar todos los días, puesto que mandan siempre los enemigos, y a sus condiciones hay que atenerse, como tampoco por una buena tarde se puede consagrar a un torero; pero al Niño de la Palma le basta tan sólo la tarde de su debut para proclamarle enormísimo torero, completo artista de depurado y finísimo estilo.

El capote y la muleta lo maneja con extraordinaria suavidad y con el temple necesario e indispensable para torear como debe de torearse; y siempre en la plaza pisa seguro el terreno que sólo les está reservado a los toreros de categoría, a las grandes figuras.

En la corrida de la Prensa se afirmó su gran personalidad, y el nombre del torero corre de boca en boca ensalzando su notable hazaña. El Niño de la Palma es un torero de extraordinario sabor, y sus lances van siempre acompañados del sabor y la línea, en armónico consorcio con la estética y el arte.

Niño de la Palma es un clásico del torero: ¡Es de Ronda y se llama Cayetano!".

Su gran éxito fue ratificado en Valencia, ante toros de la Viuda de Concha y Sierra y en Santander, ante un toro de Moreno Ardanuy.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" vestido de luces y a su lado el bonito cartel de "Niño de la Palma" toreando con el capote, pintado por el gran artista Carlos Ruano Llopis. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

Surgió una rivalidad con Manuel Báez "El Litri" y luego, por la prensa con Andrés Mérida.

Viajó a México para la temporada 1925-1926, haciendo su debut en la plaza de toros de El Toreo, de la ciudad de México, D.F., en una corrida donde se lidiaron toros de la ganadería azteca de San Diego de los Padres, donde actuó en compañía del sevillano Manuel Jiménez "Chicuelo" y el valenciano Manuel Martínez.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" rematando con una media verónica en la plaza de El Toreo, en México, D.F., al toro berrendo "Perlo" de Coaxamalucan, el 22 de noviembre de 1925. Foto: Reynoso. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

En esa plaza torearía 9 tardes. Cortó su primera oreja, el día 13 de diciembre de 1925, en la lidia del sexto toro de la ganadería de Atenco, de nombre "Molinero", triunfando con Ignacio Sánchez Mejías y Juan Espinosa "Armillita", quienes cortaron igual número de apéndices.

El 24 de enero de 1926, ante reses de la ganadería de San Mateo, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" se erigió en el triunfador de la tarde, al cortar una oreja al toro "Divertido", su segundo enemigo. Alternó ese día, en compañía de Manuel Jiménez "Chicuelo", en un mano a mano.

El 7 de febrero de 1926, en la plaza de El Toreo de Ciudad de México, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" realizó su mejor faena en tierra azteca, triunfando y saliendo a hombros tras cortar dos orejas y rabo al toro "Juan Gallardo" de la ganadería de La Laguna. Actuaron esa tarde, el rejoneador Enrique Marcos, y los diestros Manuel Jiménez "Chicuelo" y Juan Espinosa "Armillita".

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en la plaza de toros Monumental de Valencia, España. Año 1926. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Expresaba el mismo "Niño de la Palma" en una entrevista: "A un toro, al que le habían puesto de sobrenombre el de Juan Gallardo el gran periodista mexicano, lo toreé a mi gusto y le hice todo cuanto se puede hacer con la capa y con la muleta. Lo maté bien y aquello fue la locura ¡yo no había oído nunca más palmas! Corté las orejas y el rabo; muchos espectadores se arrojaban al ruedo y me abrazaban en el frenesí del entusiasmo".

Portada de la revista taurina "Fiesta Brava", de Barcelona, España, del 16 de septiembre de 1926. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El año 1926, toreó en España un total de 78 corridas, liderando el escalafón de matadores de toros, al igual que en la temporada de 1927, donde toreó 65 corridas.

Una fina y elegante media verónica de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El 21 de mayo de 1927, en la vieja plaza de toros de Madrid, de la carretera de Aragón, en la octava corrida de abono, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" tuvo un gran triunfo, cortando oreja y rabo y saliendo a hombros de la plaza. Fue a su primer toro, segundo de la tarde, de nombre "Clavelino", castaño claro, de la ganadería de Clairac, marcado con el número 113. Alternó esa tarde con Manuel Jiménez "Chicuelo" y Antonio de la Haba "Zurito" que fue corneado en el primer toro, al segundo lance, en un quite.

Retornó a México para la temporada 1927-1928, donde tuvo 5 actuaciones en la plaza de toros de El Toreo, de México D.F. El día 18 de diciembre de 1927, toreó Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" un mano a mano con Pepe Ortiz a quien llamaron "El Orfebre Tapatío", cumpliendo el torero de Ronda. Ese día, asistió como invitado especial el famoso gran aviador norteamericano Charles A. Lindbergh quien estuvo acompañado por el maestro azteca Rodolfo Gaona.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" toreando al natural. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

En 1928, después de 27 corridas toreadas, decidió retirarse. En el diario "El Imparcial", del 19 de julio de 1928, titularon "La Primera Interviú con D. Cayetano Ordóñez. El Niño de la Palma se ha cortado la coleta". He peleado mucho. Tengo bastante y estoy en vísperas de completar mi dicha con un hijo... De madrugada, el diestro le expresó a su esposa Consuelo: "Córtame la coleta, que me voy en seguida a comunicar la noticia a los periódicos. Eso es todo”.

En 1929, regresó a los ruedos y toreó un total de 43 corridas y el año 1930, tuvo 31 actuaciones. Su apoderado era Don Miguel Torres. Viajó a Venezuela, donde obtuvo grandes éxitos.

SU VISITA A VENEZUELA

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" realizando un valeroso desplante, en el Nuevo Circo de Caracas, Venezuela. Año 1930. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

Mi abuelo, Florencio Gómez Núñez, nos contaba: "Recuerdo que tuve una gran amistad con Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" desde el año 1930, cuando vino a Venezuela. El gran crítico taurino Gregorio Corrochano decía de él: "Es de Ronda y se llama Cayetano...

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" toreó varias corridas por el año de 1930, con mucho éxito, siendo contratado por mi hermano Gonzalo Gómez para torear en el Nuevo Circo de Caracas. Toreando al lado del diestro Manuel García "Revertito", el 9 de noviembre de 1930. 

Dos imágenes de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" toreando en el Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, el día de su debut. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" banderilleando en la plaza de toros Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, en 1930. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", el día de su debut en la plaza de toros Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, en 1930. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

En la tarde de su debut, demostró su prestigio de gran torero, realizando una gran faena a su primero al que le cortó las dos orejas y el rabo, a un toro criollo de la ganadería de “La Quebrada”. Esa misma tarde, Cayetano fue empitonado por su tercer toro en la pierna izquierda, pero sin sufrir graves consecuencias"

El diario "El Heraldo" de Madrid, publicó la noticia:

CARACAS, COGIDA DEL NIÑO DE LA PALMA

Caracas, 9 de noviembre de 1930. El debut del Niño de la Palma ha constituido un éxito extraordinario. El Niño de la Palma lanceó con el capote admirablemente y escuchó grandes ovaciones. Hizo quites magníficos y variados y toreó por gaoneras de modo asombroso. Puso tres pares estupendos de banderillas y realizó, en fin, una faena torerísima, con pases naturales y de pecho superiores, entre ininterrumpidas muestras de regocijo popular. Entró muy bien a matar y cobró un gran volapié, saliendo suspendido por el muslo derecho.

La cogida fue muy emocionante.

El toro rodó sin puntilla y se concedieron a Cayetano las orejas y el rabo.

Luego pasó a la enfermería. La herida no tiene importancia; pero le impidió continuar la lidia.

Valencia II tuvo, por esta causa, que matar tres toros. Mostróse valentísimo.

Revertito, bien.

(Publicado en el diario "El Heraldo" de Madrid, España, en 1930).

Triunfo del maestro de Ronda "Niño de la Palma" en Venezuela. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El domingo 23 de noviembre de 1930, Cayetano Ordóñez cortó tres orejas y un rabo en la cuarta corrida de la temporada en el Nuevo Circo de Caracas, fue una tarde histórica y memorable. Luego, el domingo 21 de diciembre de 1930, tuvo un rotundo éxito en la Plaza de Toros de La Victoria, Edo. Aragua, al cortar Cayetano tres orejas y un rabo alternando con "Valencia II", quien cortó dos orejas, saliendo los matadores a hombros entre la aclamación del público. 

Recordaba mi abuelo Florencio Gómez Núñez: "El 25 de diciembre de 1930, mi hermano Juan Vicente y yo, dimos una corrida en la Plaza de Toros Arenas de Valencia, alternando Julián Sáiz "Saleri II" junto a Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". Estuvieron muy bien los dos diestros, ante toros de nuestra ganadería de "La Providencia". "Saleri II" cortó dos orejas y rabo, mientras que Cayetano cortó una oreja. El 8 de febrero de 1931 en el Circo Metropolitano de Caracas, compartiendo cartel con Bernardo Muñoz "Carnicerito de Málaga", Cayetano Ordóñez realizó una magnífica faena cortándole a un toro de nuestra ganadería las dos orejas y el rabo, dando varias vueltas al ruedo recibiendo una enorme ovación.

A Cayetano le dio la alternativa Juan Belmonte. Recuerdo que su toreo era muy puro y espontáneo, se basaba principalmente en el dominio. El "Niño de la Palma" era un torero mandón aunque un poco atropellado, ya que los toros en algunos momentos de la lidia lo trompicaban. Realizó campañas muy exitosas y se perfilaba como figura del toreo de categoría, porque despertaba grandes expectativas, pero siempre le faltó un poco de afición para consagrarse. Su apatía e indiferencia a estar bien o mal, influyó negativamente en su carácter perjudicándole en su carrera futura. El público y la prensa no se lo perdonó nunca, increpándole fuertemente durante sus actuaciones.

En sus brillantes tardes, pudo demostrar grandes condiciones como torero, siendo variado con el capote y la muleta. Lamentablemente, algunos graves percances y su frialdad ante los toros, restaron mayores triunfos.

Particularmente en Caracas tuvo en los años 1930's un gran éxito que lo llevó a ser uno de los diestros más solicitados y queridos por los caraqueños. Era simpático y tenía un gran talento para recitar coplas. Finalizada su carrera como matador de toros, recuerdo que ingresó como subalterno a las órdenes de Pepe Luis Vázquez.

Conservo varias crónicas de las actuaciones triunfales de Cayetano Ordóñez el "Niño de la Palma" en los ruedos venezolanos, pero una tarde verdaderamente inolvidable fue la del 23 de noviembre de 1930 en el Nuevo Circo de Caracas, donde estuvo verdaderamente colosal, toreando con Ricardo González":

Cuarta de la Temporada

TARDE TRIUNFAL DE CAYETANO ORDÓÑEZ

Éxito sin precedentes

A pesar de la lluvia pertinaz e impertinente, y no obstante haber sido suspendida por unos momentos la corrida, minutos antes de la hora, acudió bastante gente a la plaza.

"Niño de la Palma" ha tenido un éxito que no tiene precedentes en la historia del Nuevo Circo de Caracas. Ha toreado de capa con una elegancia, una calma, un temple y un ajuste, imposible de superar. Ha banderilleado al cambio y al cuarteo, haciendo derroche de pupila, de facultades y de gracia. Muleteó en todas las formas imaginables, porfiándole guapamente al quedado, pisándole los terrenos, aguantándoles las tarascadas a los marrajos, estirándose con los que pasaban, derrochando esencia de toreo del más puro clasicismo; y por si fuera poco todo esto, ha matado tan colosalmente a sus tres enemigos que ha cortado las orejas de todos y el rabo de uno; el segundo, al que aguantó con cien kilos de riñones.

Imposible estar mejor. Quien no haya visto esta tarde al maravilloso rondeño creerá seguramente que hay exageración en lo que decimos. Y es que es tan enorme lo realizado por este célebre diestro, que parece más bien cosa de leyenda; pero acostumbrados como estamos a detallar la labor de los lidiadores, no queremos dejar de hacerlo en esta ocasión solemne, pues así no se olvidará ninguno de los sublimes momentos que ha tenido este maestro.

Dio a su primero dos verónicas imponentes, llevándose al quebradeño un trozo de capote en el pitón derecho. Cayetano, solo en la plaza, insiste en torear, y lo consigue lucidamente.

Bien banderilleado por Ordóñez y "Gaonita" pasa a manos del de Ronda, que después de cumplir con la Presidencia, brinda al público. Quédase solo con el toro, que derrota muy fuerte, y tiende a adelantar por el derecho. Inaugura Cayetano la sesión con uno ayudado por alto, haciendo la estatua, luego altos y de pecho. Quédase el bicho; acosa el de la Palma, y en la puerta de los sustos da unos por alto y uno de pecho, forzado; suena la música en honor del maestro. Nuevos muletazos valientes; el bovino, que quería coger, se ha desengañado, y hasta se ha asustado…ya huye…"Niño de la Palma" logra igualarlo, y entrando colosalmente, cobra un pinchazo hondo, en todo lo alto, y descabella a pulso. Ovación y oreja.

En su segundo, un negro nevado, astifino y con nervios, se recrea Ordóñez al veroniquear y remata con media ceñidísima. Ovación.

Y prepararse, caballeros, que el máximo estilista de Ronda va a desarrollar un curso de bien torear. Comienza por uno por alto, liga el natural con el de pecho, vienen luego unos medios pases, rodilla en tierra, y se queda ante la cara, recreándose en su obra. De nuevo la música ameniza la faena. Pases altos y de pecho, cita, mete el pie y consuma la suerte de recibir dejando la espada hasta la empuñadura en el mismísimo hoyo de las agujas. El toro se tambalea, Cayetano le saca el estoque, y entonces cae el bravo quebradeño, en medio de una de las ovaciones más unánimes y entusiastas que han conmovido los cimientos del Nuevo Circo. Niévase la plaza de pañuelos y se le conceden al profesor de la Universidad más antigua del toreo, las orejas y el rabo.

Se oye un ¡Viva Ronda! estentóreo, que contesta el público en masa. Sale "Niño de la Palma" a los medios y saluda a la concurrencia que lo aclama frenética.

Ya bajo la luz eléctrica sale el quinto, que es castaño, bien puesto y alegre. El rondeño da cinco lances imponentes, que arrancan una explosión de entusiasmo; luego tres más, lentos, vistosos, elegantes, insuperables, y remata con preciosa serpentina. Ovacionaza.

Por si fuere poco todo lo que ha hecho, coge los rehiletes. Cita, el toro gazapea; no importa, allí está un macho a quien no asustan tales amenazas. Aguanta una barbaridad, cambia en la mismísima cara y clava un finísimo par. Repite con uno al cuarteo que es un verdadero primor de ejecución y de colocación.

Bueno, la faena que hace Cayetano en este toro no es para ser descrita, que no es posible que haya frases para ello, ni pintores que lleven al lienzo tales portentos. Vana tarea sería intentarlo. Lo que podemos asegurar es que los que vieron esta faena no la olvidarán jamás, pues como no la borre él mismo, no habrá quien ose pretenderlo.

Ha podido observarse la diferencia inmensa que hay entre ajustarse al toro y ajustarse el toro. El primero da una emoción falsa, metiéndose en el costillar; el otro expone, y ajusta la res para ligar el otro lance y así sucesivamente la faena. Esto último es lo que hace "Niño de la Palma", de ahí su perfecto dominio, su técnica impecable, su arte majestuoso e inimitable.

También ha tocado la música durante esta faena. Y el gran estilista, para que la tarde sea completa, pincha en lo alto, entrando superiormente, y luego, a volapié neto, da una en todo lo alto. Ovación, oreja, vuelta, salida a los medios, el delirio. Una verdadera apoteosis.

No recuerdo una tarde como esta. Jamás torero alguno lidió y mató tres toros, y de diferentes condiciones, como lo ha hecho este maestro de maestros, modelo de lidiadores completos.

Tribútole desde aquí mis más francos y entusiastas aplausos, y que cada vez que vista el traje de luces tenga la voluntad y la suerte que ha tenido en esta tarde del 23 de noviembre de 1930.  

Se impone la repetición de "Niño de la Palma". Con quien quiera la Empresa; pero que vuelva el domingo y se agotará el papel.

"El Marqués de los Morrillos".

(Publicado en el Periódico "El Nuevo Diario", el 24 de noviembre de 1930).

A los pocos días de celebrada la gran corrida de toros en el Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, el periódico "El Nuevo Diario", publicó una interesante entrevista al diestro de Ronda realizada por Don Henrique Chaümer "El Marqués de los Morrillos", donde nos narra aspectos interesantes de su carrera taurina: 

UNA ENTREVISTA CON CAYETANO ORDÓÑEZ EN VENEZUELA

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en una pose muy torera. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Trabajaba hacía rato en mi escritorio; ya estaba deseando algo que me distrajera un poco de la tediosa contabilidad; nada hay que me canse tanto como los números.

De pronto entra la criada con una tarjeta, leo; Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", Miseria a Pinto 139.

Que pase.

Ya reunidos entablamos agradable conversación sobre el inmenso triunfo que obtuvo el domingo en nuestra plaza. Me habla luego de sus grandes deseos de venir a Caracas y del empeño que tiene en dejar bien puesto el nombre de España. Ha puesto en ello toda la voluntad, y a fe que lo ha conseguido con creces, pues su buen éxito no tiene precedentes entre nosotros.

¿Podría usted decirme algo de nuestras reses?

Pues verá usted. En las dos corridas que he presenciado, y en las dos que llevo toreadas, es mayor el número de toros bravos que el de regulares. Ese mismo que me tropezó en la primera corrida, era superior. Debido a lo que me gustó, salí a torearlo antes de tiempo.

¿Y de los del domingo, qué?

Mire usted. El de mayores dificultades fue el primero, como muy bien lo comprendieron ustedes. Tenía mucha fuerza y atropellaba, sabe.

¿Qué impresión tiene del público?

Muy buena, excelente. Domina aquí la afición inteligente. Hay entusiasmo, tanto, que en cuanto tiene uno un poquito de suerte, se le entrega el público.

¿Siente usted mucho cariño por su profesión?

Ya lo creo, como que fuera de los toros no tengo afición a más nada; solo el campo cuando tiene faenas de ganaderías, tienta…

Dígame, Cayetano, ¿qué siente usted antes de ir a la plaza?

Un poco de preocupación, por cómo pueda salir de la corrida y complacer al público.

¿Qué suerte le agrada más practicar?

En los toros boyantes, el de capa; en los otros, el de la muleta. Con las banderillas me gusta cambiar; mire usted, ver llegar al toro da una emoción muy grande, pero muy grande.

Y matando, ¿qué forma prefiere?

La de recibir; pero es tan difícil consumar la suerte a perfección!

¿Cuántas veces la ha ejecutado?

Verá; en Madrid fue la primera vez. Lidiábamos toros de Clairac, Chicuelo, Zurito y yo: después en Algeciras; luego en Plasencia (Cáceres); otro en Málaga, otro más en Madrid, de Félix Suárez, alternando con Valencia II y Lagartito; maté otro en Ceuta, y uno aquí, el domingo pasado. Además, he citado para recibir varias veces, pero por pinchar en hueso no he consumado la suerte.

¿Podría decirme, maestro, ¿cuáles son los toros que usted recuerda como mejor lidiados por usted?

El toro con que debuté en Sevilla, el 5 de octubre de 1924. Uno de La Laguna, en México, el día que llegó el aviador español Ramón Franco a Buenos Aires. Había un retrato del Comandante en la plaza, y cada matador le brindó un toro; eso fue en la temporada de 1925 a 1926, iba con Chicuelo y Algabeño.

En agosto de 1925 lidié muy a gusto uno de Guadalest en San Sebastián.

Sería una imprudencia preguntarle ¿cuál es la peor corrida en que ha actuado?

No señor. Hay que ser sincero…si vamos a contar sólo lo bueno…

La tarde más fatal fue la de mi presentación como novillero en el Puerto de Santa María; llovió mucho y salió la corrida muy mala.

¿Qué le ocurrió a usted con Gitanillo?

En el año 1926 surge en Madrid una cuestión, pues decían que me había impuesto para que no toreara Gitanillo de Ricla en una corrida, cosa que no era verdad. Tres años después, le toreé su beneficio y despedida en Zaragoza.

Volviendo a la cuestión, figúrese usted cómo saldría yo al día siguiente de ese comentario en Madrid.

¿Ha tenido algún torero en su familia?

Sí señor, un hermano que llegó a ser banderillero, y que por cierto no salió de Andalucía. Se llamaba Antonio y murió en La Línea de la Concepción, de una pulmonía.

Seguramente tendrá otro hermano que quiera ser torero, ¿verdad?

Sí, uno que tiene quince años y reúne muy buenas condiciones. El tiempo dirá.

Y de sus Chicos, ¿qué?

El mayor tiene dos años, cumplidos aquí el 31 de octubre último, y ya pone banderillas! Figúrese usted, yo creo que tendré que llevarlo a Nueva York para que no escuche conversaciones taurinas.

En este momento, el amigo Ordóñez recuerda algo que tiene que decir a su casa, y habla por teléfono con su señora esposa. Aprovechamos la oportunidad y preguntamos a doña Consuelo si quiere que su hijo sea torero, a lo que contesta resueltamente: "Ni Dios lo quiera. Tiene afición, pero ya se le irá quitando".

Comprendemos las angustias horribles, los verdaderos suplicios que han de pasar las pobres madres cuando ven salir a sus hijos hacia la plaza. ¡Cuántas veces lo que les han devuelto es un cadáver…!

Diga usted, Cayetano, ¿lo ha llevado a los toros alguna vez?

A corrida, no; pero a festivales, sí.

¿En dónde fue su bautizo de sangre?

Cuando tenía 16 años, probando unos toros morunos para una novillada sin caballos en Ceuta.

¿Y la cogida más grave que ha sufrido?

Sin ser grave ninguna de las que he tenido, la que más miedo me dio, fue en Almagro, en el primer año de alternativa; herida que motivó una acalorada y larga polémica entre dos médicos muy conocidos. Total, que si no llegó a Madrid a tiempo…quién sabe lo que hubiera ocurrido.

Decimos a Niño de la Palma que ha figurado, como de costumbre, en muchas ferias de la Península; y él asiente. Toreó en las de La Línea, en las de Málaga, en la de Granada, Valencia y Sevilla. Estuvo también en la de la inauguración oficial de la temporada, que se celebra en Castellón de la Plana, en marzo, y en la de Almería. Ha toreado dos en el abono madrileño, y dos extraordinarias, teniendo la mala suerte de ser cogido en la primera, quedando congestionado hasta la lidia del quinto. También en otra de abono, al entrar a matar, saltó la espada y desde esa tarde lleva como recuerdo imborrable, cuatro puntos en la frente.

¿A cuántas llegaron las contratadas en el presente año?

A 42, de las cuales perdí 4 por tener que embarcar; pero las repuse, pues aquí vengo por cinco.

Oiga, Cayetano, fuera de los toros ¿qué afición tiene usted?

La afición de los toros no me deja hueco para pensar en otra cosa.

¿Es usted supersticioso?

No, por qué?

Pues porque deseaba hacerle una pregunta un poco…

Venga, hombre, venga.

Pues allá va; ¿qué toro le ha tenido más tiempo en los pitones?

Uno de Pérez de la Concha, en Sevilla. Alternaba yo con Belmonte y Chicuelo en la feria de septiembre de 1928. Me echó mano por la axila izquierda y me retuvo tanto tiempo, que cuando me soltó me había crecido la barba. Y todo por llevar unos tirantes muy fuertes; los mismos que llevo desde que debuté; ya verá usted si tendrán resistencia.

¿Ha ganado usted algún concurso?

Sí. En una feria de Oviedo se disputaba un capote de paseo y tuve la suerte de llevármelo, por haber lidiado a gusto de aquella afición un gran toro de don Esteban Hernández. Y por cierto que ese capote lo saqué aquí el domingo. Siempre que lo uso me acompaña la buena suerte.

Gané también la medalla de la Virgen de la Esperanza, en Málaga.

¿A qué obedeció aquella retirada del año 1928?

Estuve media temporada apartado, porque llevaba ya cuatro años sin descansar. Toreando en verano y en invierno.

Cuando el torero está cansado y tiene hijos, ¿siente más, o menos miedo a los toros?

A mí me parece que voy con más ánimo, y con mayor ilusión a la plaza, pues busco el porvenir de ellos.

Y de retirada, ¿qué?

Mientras tenga fuerzas, ni pensarlo.

¿Tiene usted alguna prenda de torero que tenga alguna historia?

Llevo cuatro años organizando un beneficio para la Hermandad de San Vicente de Paúl, cuyos beneficios van destinados a un Asilo de Ancianos en Colmenar de Oreja, Provincia de Madrid, y este pueblo agradecido, me regaló un capote de paseo, por suscripción popular; hubo donantes hasta de cinco céntimos. ¿Quiere usted algo más conmovedor? Tiene, bordados en plata, sobre la seda negra, los escudos de Colmenar de Oreja y de Ronda.

¿Encuentra usted algún parecido entre nuestros campos y los de su tierra?

Los de ustedes se parecen a los del Norte de España, por las montañas y la diversidad de verdes que tienen. Santander, Bilbao…Las tierras vuestras son muy fértiles, hay buenos pastos, la hierba es grandísima. Y los caminos? Diga usted que son superiores de verdad.

¿Qué me dice usted de España?

Ni más ni menos que lo que ha dicho Su Majestad en un discurso reciente, esto es: "España es la designada por Dios como compartidora y creadora de una fe cristiana. España para quien no pudo haber mayor gloria que oírse llamar de tantos pueblos de América, la Madre Patria, las dos palabras más hermosas que pueden salir del corazón del hombre…".

Y con ese blando ceceo, con esa gracia que tienen los que nacieron en esas privilegiadas tierras "que el Betis fecunda, que borda el Genil", me dice el gran torero:

Bueno, ya no quiero cansar más a usted, ni al público. Lo demás que lo diga mi buen amigo Carnicerito.

"El Marqués de los Morillos".

(Publicado en el Periódico "El Nuevo Diario", el 29 de noviembre de 1930). 

En un extracto del artículo titulado "Ayer en La Victoria", publicado en "El Nuevo Diario", el 22 de diciembre de 1930, señaló el cronista: 

"Los Toros de La Quebrada bañaron a los de D. Esteban Hernández. Valencia II corta una oreja, Niño de la Palma se lleva dos y un rabo.

El "Niño de la Palma" en su primer toro, de nombre "Españolito", negro bravo, delantero, largo y gordo, un toro que hace honor a la divisa quebradeña, Cayetano da unos lances majestuosos, insuperables, de esos que le han dado fama de artista exquisito. Ovación. El Chato Valencia II aprovecha la bravura y la fuerza de este ejemplar criollo y da cuatro verónicas ajustadas y media, brutal. Ovación. Vuelve Niño de la Palma, y convierte la plaza en un manicomio. No satisfecho con lo que ha hecho, da tres verónicas de rodillas, y en esa posición remata con media, escalofriante. El delirio.

El de Ronda, de canela y oro, con golpes negros realiza una prodigiosa faena, una de esas que brotan cuando la inspiración está en su apogeo, y para la cual no hay frases bastante expresivas. Toca la música en honor del maestro, y éste continúa recreándose. Quintaesencia de arte supremo. Entra recto, cruzando magistralmente y deja la tiorba en el hoyo de las agujas. Ovación, oreja y rabo. Vuelta al ruedo, devolviendo estaches, y salida de los medios.

Se tributa una entusiasta ovación al ganadero Gonzalo Gómez.

(Publicado en el Periódico "El Nuevo Diario", el 22 de diciembre de 1930). 

A continuación, un extracto de la crónica escrita por don Henrique Chaümer "El Marqués de los Morrillos", en "El Nuevo Diario", el 27 de diciembre de 1930, sobre la corrida de toros efectuada en el coso de las Arenas de Valencia, Venezuela, el 25 de diciembre de 1930, donde triunfaron Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" y Julián Sáiz "Saleri II". Se lidiaron cuatro reses criollas y dos de media casta de "La Providencia", propiedad de los hermanos Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez:

PLAZA DE TOROS DE VALENCIA, VENEZUELA

Anteayer satisficimos un gran deseo: visitar a la hermosa capital de Carabobo; hemos de agradecer las finas atenciones de que fuimos objeto; en compañía de algunos colegas de la Prensa de Caracas, por parte de numerosos amigos.

Y tuvimos el placer de admirar como continúa triunfalmente el Rector de la Universidad de Ronda.

En el sexto de media casta, de la ganadería de los hermanos Florencio y Juan Vicente Gómez, hijo, destapó el tarro de las esencias. Preciosas verónicas, lances de frente por delante y un airoso recorte.

Cayetano tomó banderillas, se adornó muy bien y cuarteó un par superior; jugueteó nuevamente con el hermoso barroso y puso otro gran par.

Con la muleta desarrolló una portentosa faena: ligó seis naturales, en que corrió la mano a la manera del Pontífice de Triana; rompió a tocar la música en medio de las aclamaciones del público, y el rondeño se recreó, toreando a gusto, por altos, de pecho, molinetes, de la firma y ayudados levantando los codos. Citó a recibir y pinchó en hueso, pocos pases más, barriendo los lomos, y un volapié, fulminante, en las mismísimas péndola. Ovación imponente, oreja y varias vueltas al ruedo.

Julián Sáiz "Saleri II" tuvo una buena tarde, pues logró aplausos toreando y banderilleando al que rompió plaza. Con la muleta castigó tanto, que el animal se cayó por dos veces. Fue un trasteo valiente; entró en corto y mirando al morrillo y en él sepultó la tizona, oyendo ovación grande y cortando rabo y oreja. 

En el quinto, insuperable ejemplar de la divisa roja y gualda, de "La Providencia", Saleri II cortó una oreja y rabo, ejecutando una gran estocada.

Mi abuelo, Florencio Gómez Núñez, observando su hermosa plumilla de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", realizada por el gran pintor español Sánchez Felipe. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

Nos contaba mi abuelo Florencio Gómez Núñez, lo siguiente: "Recuerdo que el 15 de enero de 1931, organizamos mi hermano Juan Vicente y yo, un festival taurino para restaurar la Iglesia de Güigüe, Edo. Carabobo. Donamos algunos novillos e improvisamos un circo. Acudió numeroso público y entre los diestros que participaron desinteresadamente por tan noble causa, estaba presente Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". Mi padre, el General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República, asistió a la corrida que resultó exitosa".

Fue publicada, en el periódico "El Nuevo Diario", una breve reseña de la corrida y el noble propósito de su celebración:

TOROS EN GÜIGÜE, VENEZUELA

Maracay, 17 de enero de 1931.

Con el laudable propósito de arbitrar fondos para la Iglesia de Güigüe se llevó a efecto en la misma población el pasado jueves un festival taurino para el que donaron gentilmente los hermanos señores Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez, veinte novillos.

Ofrecieron su concurso desinteresado los notables matadores "Saleri II", "Niño de la Palma", "Carnicerito" y "Palmeño", y los banderilleros Mella, Cuco, Tobito y Manuel Ordóñez, correspondiendo a cada uno de los diestros la muerte de un novillo.

Para el noble fin de la fiesta se improvisó un circo, costeado por los hermanos Gómez Núñez, el que, por lo atrayente del cartel se hallaba pleno de numeroso público de Maracay, Valencia y otras poblaciones circunvecinas.

A las cuatro de la tarde, hora fijada en los programas para el comienzo de la fiesta, llegó el Benemérito General Juan Vicente Gómez, acompañado de su honorable familia, y de numerosos amigos y servidores, entre los que se hallaban el General Santos Matute Gómez, Presidente del Estado Carabobo y el doctor Rafael Requena, Presidente del Estado Aragua.

En todos los instantes de la lidia reinó verdadero entusiasmo, porque al deseo y buena voluntad de los diestros por el éxito de la fiesta, se unió la bravura de los novillos, especialmente el lidiado en último lugar y que toreó Julio García "Palmeño", teniendo éste la ocasión de mostrarse valiente, artista y deseoso de cosechar palmas, a tal punto que en premio a su descollante faena, en todos los tercios, le fueron conseguidas la oreja y el rabo de su enemigo.

De los demás matadores, ya reconocidos y bastante aplaudidos de nuestro público, sólo diremos en este corto espacio que hicieron de cuanto de bueno saben en el difícil y emocionante arte del toreo.

Felicitamos a los hermanos Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez, por este noble rasgo de altruismo a favor del templo de Güigüe y también a los artistas que ofrecieron su concurso desinteresado.

Corresponsal.

(Periódico "El Nuevo Diario", 18 de enero de 1931).

Programa del Beneficio y Despedida de "Niño de la Palma" en el Circo Metropolitano de Caracas, Venezuela, el 18 de enero de 1931. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

CIRCO METROPOLITANO DE CARACAS

Domingo 18 de Enero de 1931.

GRAN ACOTECIMIENTO TAURINO

BENEFICIO Y DESPEDIDA DE "NIÑO DE LA PALMA"

Quien tiene la alta honra de dedicarlo al señor Doctor Juan Bautista Pérez, Presidente de la República; al Benemérito señor General Juan Vicente Gómez, Comandante en Jefe del Ejército Nacional; al señor General Rafael María Velasco, Gobernador del Distrito Federal; al señor General Elías Sayago, Prefecto del Departamento Libertador; a la Prensa, a los aficionados y al público en general, de quienes ha recibido constantes pruebas de cariño.

ORDEN DEL ESPECTÁCULO:

Se lidiarán a Muerte Seis Toros de media casta de los hermanos don Florencio y don Juan Vicente Gómez, hijo, procedentes de "La Providencia".

MATADORES:

Julián Sáiz, SALERI II.

Bernardo Muñoz, CARNICERITO.

y, Cayetano Ordóñez, NIÑO DE LA PALMA

Con sus correspondientes Cuadrillas de Banderilleros.

Una Banda de Música amenizará el espectáculo.

Precios: Entrada a Palco de Sombra: Bs. 25. Entrada a Palco de Sol: Bs. 20. Delantera de Sombra: Bs. 25. Delantera de Sol: Bs. 20. Pasillos: Bs. 20. Tendido de Sombra: Bs. 12. Tendido de Sol: Bs. 7. Media entrada para los niños menores de 10 años: Bs. 6 y Bs. 3,50.

Los toros estarán a la vista del público en los corrales del Circo, desde el sábado a las 12 del día, hasta el domingo a las 11.

Se insertaron fotografías de los toros a lidiarse: "Tigre" (Negro), "Calcetero" (Osco), "Palmero" (Castaño), "Pinturero" (Jabonero sucio), "Media Onza" (Cárdeno oscuro) y "Sevillano" (Osco ojinegro).

El 25 de enero de 1931, en el Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, se lidiaron toros de Ramón Martínez Ruí. Esa tarde, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" le otorgó la alternativa al venezolano Juan Ferrer, siendo el testigo, "Saleri II".

Cartel del mano a mano entre Bernardo Muñoz "Carnicerito de Málaga" y Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en el Circo Metropolitano de Caracas, Venezuela. El 8 de febrero de 1931. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

El 8 de febrero de 1931, en el Circo Metropolitano de Caracas, Venezuela, se anunció un insólito acontecimiento taurino, "El Arte exquisito y el valor temerario en verdadera y noble competencia". Los amos del público caraqueño se disputarán las palmas en lid gallarda: Bernardo Muñoz "Carnicerito" y Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", mano a mano. Otro acontecimiento grandioso en esta extraordinaria y sensacional Corrida que garantiza el éxito: 4 toros de La Quebrada, propiedad del Coronel Gonzalo Gómez, y 4 media casta de La Providencia, propiedad de los señores Florencio y Juan Vicente Gómez, hijo. Con la acertada y estupenda selección de estas dos famosas ganaderías está asegurado el triunfo de CARNICERITO Y NIÑO DE LA PALMA y EL PÚBLICO GOZARÁ DE UNA MEMORABLE CORRIDA.

Espadas:

CARNICERITO Y NIÑO DE LA PALMA

Seis toros a muerte y dos de reserva. Los toros de muerte serán 2 de La Quebrada y 4 de La Providencia.

El diestro Bernardo Muñoz "Carnicerito de Málaga", no estuvo bien esa tarde, desaprovechando un toro noble media casta de los hermanos Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez. "Niño de la Palma" se lució en el sexto toro, también de media casta, propiedad de los hermanos Gómez Núñez, toreándolo bien con el capote y con la muleta, realizó una larga y mandona faena, para terminar con una gran estocada. La ovación fue estruendosa. "Niño de la Palma" cortó las dos orejas y el rabo, dando varias vueltas al ruedo. 

Banderilleros: "Mella", "Cuco", "Gaonita", "Ordóñez". Puntillero: "Potoco".

Señaló Carlos Salas, en su libro "Los Toros en Venezuela": "Fue una corrida en base a una faena. ¡Pero qué faena, amigo aficionado! Aún se recuerda con cariño entre los aficionados que llenaron la vieja plaza de Puerto Escondido aquella tarde memorable!".

Posteriormente, Cayetano se marchó para España, donde nació su hijo Antonio, el 16 de febrero de 1932, en Ronda.

El 5 de abril de 1931, toreó en la plaza de toros de Madrid, una corrida de Miura, en compañía de Antonio Posada y el mexicano Fermín Espinosa "Armillita". Esa campaña, actuó un total de 22 corridas.

El 6 de marzo de 1932, en el Nuevo Circo de Caracas, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" a su regreso de Bogotá, Colombia, se encerró en solitario, lidiando toros de Barreto, regresando a España.

Un clásico pase de pecho de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en la plaza de toros de Vista Alegre en Madrid. Año 1935. Foto: Santos Yubero. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El 16 de octubre de 1932, en la plaza de toros de Madrid, ante toros de Rincón, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" cortó una oreja y salió a hombros de la plaza, abriendo grandes esperanzas a los aficionados taurinos. Su apoderado era don Juan de Lucas. Ese año, toreó un total de 13 corridas; en 1933, 20 corridas y en 1934, 35 corridas, obteniendo triunfos en Sevilla y Málaga.

El 28 de octubre de 1934, en la plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, se lidiaron toros de Clairac, para los diestros Juan Belmonte, quien cortó tres orejas y un rabo; Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma, cortó una oreja y Joaquín Rodríguez "Cagancho", una oreja. 

Los días 5 y 18 de mayo de 1935, obtuvo Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" dos triunfos en la plaza de toros de Vista Alegre, en Carabanchel. El 5 de mayo, lidiando toros de Saltillo, junto a Pepe Gallardo y Fernando Domínguez, en el cuarto toro, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" le cortó las dos orejas. El 18 de mayo, ante los toros de Pablo Romero, a su segundo astado, "Niño de la Palma" cortó una oreja, le acompañaron esa tarde, Pepe Gallardo y el mexicano Lorenzo Garza.

El 20 de mayo de 1935, en Baeza, ante toros de Aleas, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" cortó una oreja; Pepe Gallardo ese día, cortó las dos orejas y el rabo y Braulio Lausín "Gitanillo", no tuvo fortuna.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", Manolo Bienvenida y Juan Belmonte, en la Maestranza de Sevilla, el 29 de septiembre de 1935, preparándose para lidiar toros de la ganadería de Pallarés. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El 11 de julio de 1935, en la plaza de toros Monumental de Las Ventas de Madrid, se lidiaron toros de Ricardo Ayala, para los diestros Marcial Lalanda, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" y "El Estudiante", quienes torearon la primera Corrida de la Asociación de la Prensa en ese coso venteño. Ese año, triunfó Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en Sevilla, Málaga, Algeciras y Barcelona, reafirmando su buen momento.

El 15 de agosto de 1935, en Jaén, recibió una grave cornada, que lo alejó de los ruedos un mes, restándole doce actuaciones. Esa temporada toreó 33 corridas. En 1935, viajó al Perú, para torear cinco corridas, cuatro de ellas en Lima.

Actuó en la temporada mexicana de 1935-1936, en la plaza de El Toreo, dos tardes. Allí compartió cartel con los matadores de toros Joaquín Rodríguez "Cagancho", Jesús "Chucho" Solórzano, David Liceaga y Fernando Domínguez.


Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Durante la Guerra Civil Española, regresó a Venezuela donde participó en varios festejos en mayo de 1937, en el Nuevo Circo de Caracas, cortando orejas y realizando faenas apoteósicas. 

El 9 de mayo de 1937, en el Nuevo Circo de Caracas, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" cortó dos orejas, ante toros de la ganadería de Arturo Sánchez Cobaleda, en compañía de los diestros aztecas José González "Carnicerito de México" y Ricardo Torres. El 16 de mayo, en la misma plaza, "Niño de la Palma" realizó dos grandes faenas, ante toros de Manuel Angoso y el Marqués de los Altares. El 23 de mayo, en el mismo coso de San Agustín, toreó el "Niño de la Palma" junto a Bernardo Muñoz "Carnicerito de Málaga" y José González "Carnicerito de México", lidiando cinco reses de María Montalvo y uno, de Trespalacios.

El 14 de agosto de 1937, en un festival celebrado en la Maestranza de Sevilla, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" fue el triunfador de la tarde, al cortar una oreja a un toro de Villamarta. Le acompañaron, los diestros Manuel Jiménez "Chicuelo" y Joaquín Rodríguez "Cagancho".

Cayetano Ordóñez ejecutando la suerte suprema en la Maestranza de Sevilla. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El 17 de octubre de 1937, en la Maestranza de Sevilla, Cayetano Ordóñez cortó una oreja a un toro de la ganadería de Miura, alternando con Luis Fuentes Bejarano, quien cortó dos orejas y rabo y Domingo Ortega.

Después de sus sonoros triunfos, Cayetano regresó a Venezuela y se volvió a presentar en el Nuevo Circo de Caracas en enero de 1938 y mayo de 1939.

El 9 de enero de 1938, en el Nuevo Circo de Caracas toreó un mano a mano con reses criollas, con el venezolano Julio Mendoza Palma; y, el 23 de enero de 1938, en la misma plaza, realizó un mano a mano con Domingo Ortega, lidiando toros peruanos.

El 21 de mayo de 1939, en el Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, lidiando toros de la ganadería venezolana de "Guayabita", Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" le otorgó la alternativa a Celso Díaz "Magritas de Caracas", completando el cartel Pedro Ramírez "Torerito de Triana". 

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

El 2 de junio de 1940, en la plaza de toros Monumental de Las Ventas de Madrid, ante toros del Marqués de Villamarta, torearon los diestros Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", Antonio García "Maravilla" y Rafael Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana".

El 17 de septiembre de 1944, en un festival, en la Maestranza de Sevilla, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" y Juan Belmonte fueron los triunfadores de la tarde, al cortar dos orejas cada uno, ante reses de distintas ganaderías. Integraron el cartel en compañía del rejoneador Pepe Anastasio y los matadores de toros Manuel Jiménez "Chicuelo", Francisco "Paquito" Casado y Rafael Gómez "Gallito".

SU DESPEDIDA Y ÚLTIMA OREJA LA CORTÓ EN CARACAS

Cayetano Ordoñez "Niño de la Palma" fue un auténtico ídolo de la afición caraqueña, figurando en los carteles de importancia durante varias temporadas. En el Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, el 5 de enero de 1947, vistió de luces por última vez, en festejo de despedida, cortando su última oreja. Foto: Manuel H. Caraballo. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" se despidió como matador de toros, vestido de luces, de la afición caraqueña, en el Nuevo Circo de Caracas, en compañía del español Julián Marín y el mexicano, Javier Chávez "Terremoto", el 5 de enero de 1947.

Nos relataba mi abuelo Florencio Gómez Núñez, lo siguiente: "Ya con el peso de los años y sus condiciones físicas mermadas, ingresó como banderillero de Pepe Luis Vázquez. Como era uno de los diestros más queridos por la afición caraqueña, se organizó en el Nuevo Circo de Caracas la despedida de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", el 5 de enero de 1947. Cayetano se vistió de luces y realizó una meritoria faena cortando una oreja en el ruedo caraqueño, a un toro mexicano de La Trasquila, siendo su trofeo el último conquistado en su larga carrera como matador de toros. Le tocó a nuestro país el honor de despedir con ese tributo al querido e inolvidable "Niño de la Palma" que tantas tardes de gloria conquistó en ruedos de Venezuela y el mundo. Cayetano siempre fue muy apreciado y querido en nuestra tierra. Será inolvidable en mi memoria, su recuerdo y amistad heredada años después por sus hijos: Cayetano, Juan, Antonio, Pepe y Alfonso, componentes de la dinastía torera fundada por él".

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", también tuvo una hija de nombre Ana de Jesús Ordóñez Araujo, fallecida en Sevilla el 10 de febrero de 2008.

Fotografía del niño Juan Cayetano Ordóñez Araujo, dedicada por su padre Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" a mi abuelo, que dice: "A Don Florencio Gómez recuerdo de Juan Cayetano. Su afectísimo. Cayetano". (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

El legendario Cayetano Ordóñez Aguilera "Niño de la Palma" aparece como subalterno detrás de su hijo, Cayetano Ordóñez Araujo, acompañándolo en esta fotografía realizada por Arjona. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

El 16 de enero de 1949, con las orejas y el rabo cortados en el Nuevo Circo de Caracas, Venezuela, aparece Juan de la Palma, teniendo a su lado a Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", su padre, que actuaba como subalterno. Foto: Ríos. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

En la plaza de toros Maestranza de Caballería de Sevilla, "Niño de la Palma" actuó un total de 41 ocasiones: 6 novilladas, 27 corridas y 8 festivales.

En la plaza de toros Monumental de Madrid, el viejo coso aledaño a la carretera de Aragón, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", toreó en las corridas de la festividad de San Isidro: El 17 de mayo de 1926, toros de Saltillo, alternando con Antonio Márquez y Marcial Lalanda; el 19 de mayo de 1927, toros de Santa Coloma, con Antonio Márquez y Félix Rodríguez; el 16 de mayo de 1928, toros de Miura, con Rafael Gómez Ortega "El Gallo" y Manuel Jiménez "Chicuelo"; el 19 de mayo de 1928, toros de Coquilla, con "Valencia II" y Francisco Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana"; el 19 de mayo de 1929, toros de Clairac, Pagés y Terrones, junto a Antonio Márquez y Fausto Barajas; finalmente, el 18 de mayo de 1930, toros de Graciliano Pérez-Tabernero, con Antonio Márquez, Nicanor Villalta y Francisco Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana".  

En la plaza de toros de Monumental de Pamplona, España, asistió 6 temporadas a la Feria de San Fermín, actuando un total de 14 corridas, lidiando 26 toros, cortando 2 orejas y escuchando 3 avisos. Allí, también recibió una cornada.

En Venezuela, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" tuvo 23 actuaciones. Se presentó 14 veces la plaza de toros Nuevo Circo de Caracas; 4 ocasiones en La Victoria, Edo. Aragua; 2 oportunidades en las Arenas de Valencia, Edo. Carabobo; 1 vez, en el Circo Metropolitano de Caracas; 1 vez, en Cagua, Edo. Aragua; y 1 vez, en Güigüe, Edo. Carabobo. Estoqueó, 59 toros, cortó 14 orejas y 4 rabos. 

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" con su hijo Antonio Ordóñez, primera figura del toreo, en la plaza de toros de Ronda, en una corrida goyesca. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

En 1954, para celebrar el bicentenario del nacimiento de Pedro Romero, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", creó la primera Corrida goyesca de Ronda en la que participaron Antonio Bienvenida, el venezolano César Girón y su hijo, Cayetano Ordóñez Araujo.

De izquierda a derecha: Antonio Bienvenida, César Girón y Cayetano Ordóñez Araujo, actuando en la primera Corrida Goyesca realizada en Ronda, el 16 de septiembre de 1954. Foto: Arjona. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

El famoso escritor, premio Nobel de Literatura y gran aficionado taurino, Ernest Hemingway, describió en su libro "Fiesta" de 1926, a Pedro Romero, torero inspirado en el diestro Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". También, en su obra "Muerte en la Tarde" de 1932, relató sus opiniones sobre el "Niño de la Palma". Fueron grandes amigos y esa buena amistad continuaría, especialmente, con su hijo Antonio Ordóñez Araujo, quien se convirtió en primera figura del toreo.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" con su amigo el célebre y mundialmente conocido escritor norteamericano don Ernest Hemingway y Antonio Ordóñez. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El gran poeta Rafael Alberti le escribió su famosa "Chuflillas al Niño de la Palma", y José del Río Sáinz "Un Torero Andaluz". Los famosos pintores Carlos Ruano LLopis, Andrés Martínez de León y Alejandro Sánchez Felipe se inspiraron en su figura y realizaron obras. Se publicaron los excelentes libros taurinos como "Estirpe y Tauromaquia de Antonio Ordóñez", de la colección La Tauromaquia de Espasa Calpe, escrito por Antonio Abad Ojuel en 1986 y "Dinastías Dominguín, Ordóñez, Rivera" escrito por Antonio D. Olano, en 1988.

Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", pintado por Carlos Ruano Llopis. (Archivo Hnos. Dupouy Gómez).

El sábado, 30 de septiembre de 1961, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" falleció a los 57 años de edad, en una clínica cercana a Fuencarral, debido a una afección pulmonar.

El 1 de octubre de 1961, a las 11 de la mañana se trasladó el féretro de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" desde su domicilio, en la calle Máiquez 36, de Madrid, hacia el cementerio de Nuestra Señora de La Almudena, donde fue enterrado. Entre los matadores de toros que asistieron a su sepelio, se encontraban: Nicanor Villalta, Pepe Bienvenida, Agustín Parra "Parrita", Emiliano de la Casa "Morenito de Talavera", Rafael Gómez "Gallito", Rafael Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana", Domingo Ortega, Antonio García "Maravilla", Emilio Ortuño "Jumillano" y Victoriano Valencia, entre otros. En la plaza de toros Monumental de Las Ventas, esa tarde, se guardó un minuto de silencio, en recuerdo a Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma". Los diestros Joaquín Bernadó, el colombiano Pepe Cáceres y Francisco Antón "Pacorro", se desmonteraron al terminar de hacer el paseíllo.

Mi entrañable amigo de muy grata recordación, el Dr. Pepe Cabello, crítico taurino venezolano de gran cultura y conocimiento, dedicó un importante capítulo a Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en su libro "Toreros fuera del ruedo", recordando, lo siguiente: "Forjó una época con su toreo fino de capa y muleta, colocándose entre los mejores matadores en las temporadas de 1924 a 1929. Su vida llena de aventuras, con sonrisa despreocupada, bajo su pronunciada calva, es la historia de una gloria que se apagaba lentamente. Terminó como banderillero, casi olvidado. Tan sólo los éxitos de su hijo Antonio, el tercero de cinco varones, pudo rescatarlo del anonimato en que su bohemia lo había perdido".

El 13 de octubre de 1961, el gran maestro Antonio Ordóñez, agradeció al Dr. Pepe Cabello, por sus interesantes artículos, muy especialmente, por el publicado, el 1 de octubre de 1961, en el diario "El Nacional", con motivo del fallecimiento de su querido padre, Cayetano Ordóñez "Niño de La Palma". En una carta le expresó con cariño, lo siguiente: "Querido amigo Pepe: No sabes cuanto te hemos agradecido tanto mi madre, como mis hermanos y yo, tus artículos sobre mi padre (q.e.p.d.). Solo podemos decirte que Dios te lo pague y que nunca olvidaremos esta prueba de afecto. Muchos abrazos de Antonio Ordóñez".

Curiosamente, el 19 de octubre de 1961, falleció en Madrid, el célebre periodista y crítico taurino, don Gregorio Corrochano, quien en 1925 había escrito su famoso artículo, acuñando en el título la imborrable frase: "Es de Ronda y se llama Cayetano".

Sin duda alguna, Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma", sobresalió y se destacó en su época como un torero de una gran clase y pureza. Demostró unas facultades admirables y dominó todas las suertes de la lidia con ejemplar maestría y sabiduría que fue transmitida a sus hijos fundando una dinastía, siendo su hijo Antonio Ordóñez, el máximo exponente de su arte y finísimo toreo rondeño.   

Monumento de Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en Ronda, Málaga, España. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

En conmemoración de las fechas centenarias de su alternativa y confirmación, he querido recordar y rendir homenaje al "Niño de la Palma", exquisito matador de toros, cuyos orgullosos bisnietos, Francisco y Cayetano Rivera Ordóñez han seguido enalteciendo su legado como figuras del toreo. 

Rafael Dupouy Gómez


No hay comentarios.:

Publicar un comentario