(Por: Rafael Dupouy Gómez)
jueves, 31 de diciembre de 2020
FLORENCIO GÓMEZ NÚÑEZ: 25 ANIVERSARIO DE SU FALLECIMIENTO
martes, 10 de noviembre de 2020
ARTURO USLAR PIETRI Y SU OPINIÓN SOBRE EL TOREO
(Por: Rafael Dupouy Gómez)
La Fiesta Brava, en los tiempos que vivimos, ha sido objeto permanentemente de injustificados ataques y absurdas descalificaciones, promovidas principalmente por gente que desconoce absolutamente lo que encierra el maravilloso mundo del toro y su indudable aporte al arte, la cultura, historia y tradición, logrando así consolidarse a través del tiempo.
Por tal motivo, en defensa del espectáculo taurino, comparto con los amables lectores una importante nota, al parecer inédita, escrita por el Doctor Arturo Uslar Pietri, en donde expresa y manifiesta su valiosa opinión sobre el arte del toreo.
Al Doctor Arturo Uslar Pietri, el más connotado escritor e intelectual venezolano del siglo XX, lo atrajo intensamente la Tauromaquia. Muy pocos conocen la afición taurina que palpitó en el alma del insigne escritor, ganador del Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1990. Esa faceta ha sido prácticamente desconocida por biógrafos, historiadores y estudiosos de su vida íntima.
A continuación, su importante y muy valiosa opinión sobre el toreo:
"El arte del toreo es, ciertamente, un arte muy calificado y también la supervivencia de un arcaico rito religioso, una mezcla de danza mortal, de culto prehistórico al gran animal totémico y de experiencia de la vecindad de la muerte, que ha alcanzado en sus grandes intérpretes una calidad creadora. Tiene mucho que ver con el sentido del ritmo, con la sensibilidad plástica, con una presencia simbólica de formas y colores, y una inminencia trágica en suspenso continuo, lo que implica una condición única de la vocación de sentir, crear, arriesgar y expresar, que va más allá del gesto teatral.
No es de extrañar que los grandes toreros, terminado el corto verano de su gloria popular, no hallen fácil acomodo para su temperamento. Algunos han desembocado en otras preocupaciones y experiencias. Pienso en el Belmonte casi filosófico de sus años de retiro, en el Ortega que iba a oír a su homónimo Don José y que escribió algunas de las cosas más inteligentes que se han dicho sobre el toreo. Hubo, también, el caso revelador de Sánchez Mejías y su teatro.
Ahora es el caso de Sebastián Palomo Linares. Sebastián pinta, pero sin maestro ni aprendizaje de taller, sino por impulso de su propia condición, con colores y formas que busca y que halla en su sensibilidad. Lo que hace no se parece a ningún modelo y tiene tanto carácter personal como el que tuvo en la plaza.
La visión que el torero tiene del toro será para siempre su visión del mundo, de la que no podrá evadirse nunca".
Arturo Uslar Pietri, Caracas, 1991.
El Doctor Arturo Uslar Pietri, celebró en varias ocasiones su cumpleaños en Madrid, porque coincidía con la Feria de San Isidro. Muchas veces se le pudo ver en la Monumental de Las Ventas, como en esta fotografía, en compañía del gran cronista taurino venezolano Pepe Cabello, disfrutando las corridas de toros que tanto le apasionaban. Foto: Cuevas. Año 1998. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
RECORDANDO EL ORIGEN DE SU AFICIÓN TAURINA
Arturo Uslar Pietri en compañía de su fraternal amigo
de toda la vida, Florencio Gómez Núñez, quien le transmitió su gran afición
taurina. Año 1928.
El Doctor Arturo Uslar Pietri, vivió su infancia y juventud en Maracay, Estado Aragua (Venezuela). Siendo hijo primogénito de doña Helena Pietri Paúl y del General Arturo Uslar Santamaría, quien fue funcionario del gobierno del Gral. Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela, ejerciendo el cargo de Diputado al Congreso de la República y Fiscal General del Estado Aragua.
La desbordada afición taurina de los hijos del General Gómez, Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez, contagió al notable escritor apasionándose por la Fiesta Brava. Arturo Uslar Pietri, fue cronista taurino en sus años mozos y utilizaba el seudónimo de “Don Critias, el exiguo”. Los hermanos Gómez Núñez, fundaron “Guayabita”, la primera ganadería de toros de lidia pura casta española en Venezuela y fueron propietarios e impulsores de la construcción de la hermosa plaza de toros Maestranza de Maracay, joya arquitectónica encomendada a su gran amigo, el arquitecto Carlos Raúl Villanueva.
Su primera novela “Las Lanzas Coloradas”, fue publicada en París en 1931, enviándoles dos ejemplares con sentidas dedicatorias de amistad y admiración, al General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela, y a su fraternal amigo Florencio Gómez Núñez.
A su regreso a Venezuela, acudió a presenciar las ferias de Maracay de 1934 y 1935, organizadas por los hermanos Gómez Núñez, a quienes les dedicó un hermoso poema sobre la Maestranza de Maracay (Venezuela).
Arturo Uslar Pietri, fue invitado muchas veces por Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez, a la ganadería “Guayabita” y tuvo la oportunidad de conocer, conversar y fotografiarse con los famosos diestros Manuel Jiménez “Chicuelo” y Vicente Barrera en la dehesa aragüeña.
En raras ocasiones, el notabilísimo escritor, se atrevió a poner en práctica su afición ante la cara de una vaquilla en las haciendas “La Providencia” y “Guayabita” de los hermanos Gómez Núñez. Amenas tertulias y sabrosas terneras formaban parte de la vida sana en el campo, en compañía de sus amigos Efraín Gómez, Mario Pacheco, Roberto Santana Llamozas, Ramón Martínez Ruí, Vicente Martínez Ruí, Heriberto Ramírez, Alejandro Funes, Abelardo Martínez Machado y los comandantes Diego Rodríguez Garmendia, Pedro Francisco Pereda Bermúdez y Francisco Leonardi.
Arturo Uslar Pietri, conversando muy sonriente en compañía del maestro del toreo Andrés Vázquez, en Madrid, España. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El maestro Sebastián Palomo Linares, gran amigo del intelectual venezolano y de su hijo Federico Uslar Braun, le regaló un capote que conservó el escritor en un lugar especial de su hogar.
Rafael Dupouy Gómez en compañía del Doctor Arturo Uslar
Pietri. Caracas, año 1994. Dedicatoria del escritor que dice: “Para
los hermanos Dupouy Gómez con el afecto hereditario de Arturo Uslar Pietri. Caracas,
año
Entre los innumerables premios y condecoraciones
nacionales e internacionales, el Doctor Arturo Uslar Pietri en 1959, fue elegido Miembro
Correspondiente de la Real Academia Española de la Lengua. En 1973, conquistó
el Premio Hispanoamericano de Prensa Miguel de Cervantes, le concedieron la
Gran Cruz de la Orden de Isabel La Católica en 1984, el Instituto de Cultura
Hispánica de Madrid, promovió la “Semana del Autor” en 1986 y recibió el Premio
Príncipe de Asturias de las Letras en 1990 como un merecido homenaje al más
importante exponente de la intelectualidad venezolana. Falleció el 26 de
febrero de
Rafael Dupouy Gómez
martes, 20 de octubre de 2020
CÉSAR GIRÓN: ANIVERSARIO DE SU FALLECIMIENTO
(Por: Rafael Dupouy Gómez)
El siempre admirado y recordado César Girón, máxima figura del toreo venezolano. Foto: Martín Santos Yubero. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
Se cumplen
49 años del fatal accidente de tránsito que le costó la vida, el 19 de octubre
de
Indiscutiblemente,
César Girón, ha sido la figura del toreo más importante que ha dado Venezuela
en toda su historia. Por tal motivo, dedico este escrito, resaltando algunos de
los aspectos más destacados de su gloriosa y memorable carrera taurina, porque
César fue el iniciador, junto a sus hermanos Rafael, Francisco “Curro”, Efraín,
Freddy y Pepe Luis de la dinastía torera más representativa de Venezuela.
El
venezolano César Girón, nació el 13 de junio de 1933, en la humilde barriada
denominada la “Roca Tarpeya”, en Caracas, no como muchos piensan que nació en
Maracay. Vino al mundo el mismo año que fue inaugurada la Maestranza de Maracay, el 20 de enero de 1933 por mi bisabuelo, el
Benemérito General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela
y sus hijos Juan Vicente y Florencio Gómez Núñez. La decisión de sus padres,
Carlos Girón y Esperanza Díaz, de mudarse para Maracay, fue determinante para
que a muy temprana edad naciera su afición y formación como torero. De no
existir esa hermosa plaza de toros, César Girón y sus hermanos, seguramente, se
hubieran dedicado a otra actividad.
PEDRO PINEDA
ENTUSIASMA A DON FLORENCIO G
César Girón, muy joven de becerrista. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El maestro
Pedro Pineda, fue la persona que inició a César Girón en el mundo del toro,
enseñándole a torear. El 12 de mayo de 1946, cuando se presentó el célebre mano
a mano de “Manolete” y Carlos Arruza en Maracay. César, con apenas 12 años de
edad, logró escabullirse y pudo presenciar el toreo de “Manolete”, la figura
taurina del momento. Pero su verdadera admiración se volcó en el “Ciclón”
mexicano Carlos Arruza, porque le gustó mucho su forma de torear que,
posteriormente, le sirvió como modelo a imitar. César Girón, como aspirante a
novillero, se había presentado con bastante éxito en Maracay, Valencia y San
Juan de los Morros en el año 1949.
Contaba mi
abuelo Florencio Gómez Núñez, que cuando el maestro Pedro Pineda, se dedicó a
formar nuevas promesas del toreo venezolano, un día lo visitó y le dijo: “Mire,
don Florencio, yo quiero que Ud. vea a un muchachito Girón que yo creo que va a
ser un torero muy bueno”.
César, tenía
16 años cuando fue a verlo mi abuelo, por primera vez, a Maracay y le gustó
mucho. Después, lo trajeron a debutar en Caracas y Pedro Pineda, estuvo la
noche anterior visitando la casa de mi abuelo, entusiasmándolo, para que no
dejara de verlo torear. Su debut como novillero en el Nuevo Circo de Caracas,
fue el 1 de octubre de 1950. Su compañero de cartel Ramón Moreno Sánchez,
resultó herido y César tuvo que lidiar y dar muerte él solo a los seis
novillos. Esa tarde obtuvo un rotundo éxito, cortando tres orejas y un rabo,
saliendo a hombros aclamado por una multitud entusiasmada. Ya César, se
perfilaba como una prometedora figura. Al finalizar la corrida, mi abuelo lo
visitó en la casa donde se hospedaba y lo conoció personalmente. Lo felicitó
por su exitosa presentación en Caracas y desde ese momento, nació una gran amistad
con él y sus hermanos Rafael, “Curro” y Efraín.
César Girón en compañía de su querido maestro Pedro Pineda. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 22 de
diciembre de
Fernando Gago, hermano de Andrés Gago, quien era el apoderado del diestro mexicano Carlos Arruza, el ídolo de César Girón, se sorprendió después de verlo torear y decidió llevárselo para España, el 4 de abril de 1951.
Don
Florencio Gómez Núñez y César Girón, momentos antes de vestirse de luces. San
Cristóbal, Venezuela, el 25 de enero de 1969. Foto: Miguel Rodríguez. (Archivo: Hnos.
Dupouy Gómez).
Debutó como
novillero en España, el 13 de mayo de 1951, en Miranda de Ebro (Burgos). Ese
año toreó 19 novilladas con un extraordinario éxito.
El 16 de
marzo de 1952, César Girón triunfó como novillero en la Plaza Monumental de
Barcelona (España), toreando con Carlos Corpas y Antonio Chenel “Antoñete”,
lidiando reses de Garro y Díaz Guerra Hermanos. César Girón, a su primer
novillo de nombre “Patatero”, marcado con el número 91, lo recibió con seis
verónicas y una media muy ceñida. Colocó tres buenos pares de banderillas.
Realizó preciosos quites con el capote y brindó la muerte del novillo a don
Pedro Balañá, realizando una gran faena con la muleta muy variada y valiente,
matando muy bien a su enemigo. Le otorgaron una oreja, dio la vuelta al ruedo y
recibió muchos ramos de flores por parte de los asistentes. Se cumplió uno de
sus sueños, torear en España y en una plaza de primera categoría. Su segundo
astado, el sexto de la tarde, se llamó “Diano”, un toro negro lucero muy bravo.
César Girón, le dio catorce verónicas lentas y majestuosas que hicieron que
sonara la música y la gente se pusiera en pie para aplaudirle fuertemente.
Lidió muy bien y variado con la muleta y realizó un estoconazo hasta los
gavilanes en el propio hoyo de las agujas. Le otorgaron las dos orejas, paseó
en hombros por el redondel, saliendo en esa forma por las calles de Barcelona.
La música no paró de sonar hasta que abandonó el diestro venezolano la plaza.
Ese importante triunfo le valió a César que lo repitieran el 19 de marzo de
1952, en la Plaza Monumental de Barcelona (España), lidiando novillos de don
José Manuel Domecq, alternando con Mariano Martín “Carriles”, Antonio Chenel
“Antoñete” y Fernando Jiménez. Apenas salió el venezolano a realizar el
paseíllo, escuchó la primera ovación de la tarde. Realizó dos buenas faenas y
salió a hombros, nuevamente, ante un público enardecido. Fue el triunfador de
la tarde.
El 27 de
julio de 1952, torearon en la Plaza Monumental de Las Ventas de Madrid, los
novilleros Miguel Ortas, el mexicano Rafael García Olmos y César Girón, quien
cortó dos orejas al novillo de nombre “Perdiguero”, de la ganadería de don
Marceliano Rodríguez. César Girón salió a hombros de la multitud, siendo la
primera salida por la Puerta Grande del venezolano en esa prestigiosa plaza de
toros. Tres días antes, en la Plaza Monumental de Valencia (España), César
Girón había salido a hombros en compañía de “Antoñete”.
César Girón,
poco a poco, logró abrirse paso presentándose en las plazas españolas,
batallando por ganarse el puesto que lograría en 1952 como líder de los
novilleros, toreando 40 novilladas en España. Su casta torera lo catapultó
sumando triunfos, siendo verdaderamente difícil para un torero americano entrar
de lleno a competir con las figuras españolas, porque se les exigía mucho más y
tenían que justificarse, arrimándose a los toros con valentía, orgullo y
pundonor.
ALTERNATIVA EN
BARCELONA (ESPAÑA)
César Girón triunfando en la Monumental de Barcelona, España, siendo llevado a hombros. Foto: Valls. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 28 de
septiembre de 1952, el venezolano César Girón, tomó la alternativa en la Plaza
Monumental de Barcelona (España), ante toros de la ganadería de Antonio
Urquijo, siendo su padrino el mexicano Carlos Arruza, quien reaparecía y viajó
especialmente a España para doctorarlo. Agustín Parra “Parrita”, quien se
retiraba de los ruedos, actuó como testigo esa tarde. El toro de la alternativa
de César Girón se llamó “Farolillo”, marcado con el número 188, al que le
realizó una buena faena, pero la remató con un pinchazo, media estocada y un
descabello, dando la vuelta al ruedo. En su segundo toro, César estuvo muy
valiente; acabó con una estocada y cortó una oreja.
Viajó a
México y confirmó su alternativa, el 4 de enero de 1953, de manos de Manuel
Capetillo con el toro “Canastillo”, de Tequisquiapan. Actuaron también Jorge
Aguilar “El Ranchero” y José María Martorell. César, toreó dos corridas en la
Monumental de México y cortó una oreja, la primera que cortaba un torero
venezolano en el país azteca.
César Girón,
demostró su jerarquía de primera figura del toreo en las plazas venezolanas,
como aconteció en la Maestranza de Maracay, el 31 de enero de 1954. El cartel
era verdaderamente interesante, porque reunía a las tres figuras venezolanas
del momento, el “Diamante Negro”, César Girón y Joselito Torres. Fue una tarde
histórica para César, porque le cortó a un toro de “Guayabita” de nombre “Apetitoso”,
las dos orejas, el rabo y la primera pata que se concedía a un matador de toros
venezolano en ruedos nacionales. Anterior a él, en la misma Plaza, sólo le
habían concedido ese trofeo al diestro mexicano Lorenzo Garza. Siendo ésta, la
primera pata que se cortó en la Maestranza de Maracay, el 22 de mayo de
1949.
LA REAL MAESTRANZA
DE SEVILLA A SUS PIES
César Girón en la Real Maestranza de Sevilla. Abril 1954. Foto: Arjona. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El año de su
consagración como torero fue en la temporada de 1954, logrando uno de los
acontecimientos más impresionantes, cortar las dos orejas y el rabo a un toro
en la Feria de abril de Sevilla, el 27 de abril de 1954, y volver a repetir tal
hazaña en la Real Maestranza sevillana, el 29 de abril de ese mismo año, al
cortar, nuevamente, las dos orejas y el rabo en un tiempo récord de 48 horas de
diferencia. César Girón, se convirtió en el único matador de toros en lograrlo
en una misma Feria de abril de Sevilla. En la primera corrida de la Feria de
Sevilla, el 27 de abril de 1954, César Girón en su primer toro, de la ganadería
de Cobaleda, fue aplaudido con la capa, puso banderillas entre ovaciones y
realizó una buena faena con ayudados por alto, derechazos y naturales rematados
con el de pecho. De hinojos realizó desplantes que pusieron al público de pie.
Ejecutó una gran estocada y le otorgaron las dos orejas y el rabo. En su
segundo enemigo, de la ganadería de Guardiola, escuchó palmas. Alternó esa
tarde con Manolo Vázquez y Pedro Martínez “Pedrés”.
El 29 de
abril de 1954, en la tercera corrida de Feria, César Girón volvió a triunfar en
la Maestranza de Sevilla, ante un toro de la ganadería de Guardiola. César
Girón, brindó la muerte del toro a la famosa artista española Lola Flores.
Citando desde lejos, realizó naturales de gran calidad aguantando la embestida
del toro que hicieron levantar al público de sus asientos, haciendo sonar la
música. El momento culminante fue cuando se perfiló a entrar a matar, logrando
una estocada colosal, fulminante en todo lo alto que le valieron las dos orejas
y el rabo. Fue una faena muy completa en todos los tercios. No pudo César
recibir los trofeos, porque al saludar a la presidencia, cayó desplomado herido
en la arena. El toro que tenía mucha fuerza hasta el final, lo hirió durante la
faena cuando se adornaba, siendo empitonado. Lo acompañaron esa tarde el
rejoneador Ángel Peralta, Manolo Carmona y Juanito Posada.
Gran hazaña
en la Feria de Abril de Sevilla de 1954, en dos corridas de toros, cuatro
orejas y dos rabos.
SUMANDO TRIUNFOS
La absoluta entrega, maestría y valor del venezolano siempre
demostrada en el ruedo. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
Triunfos
resonantes en la feria de San Fermín y América. En la Plaza Monumental de
Pamplona (España), el 8 de julio de 1954, al toro “Campanillo”, número 38 y
tercero de la ganadería de Sepúlveda, le cortó las dos orejas y el rabo, dando
dos vueltas al ruedo; y luego cortó otra oreja al sexto “Gibilín”, número 25.
Toreó esa tarde con Julio Aparicio y Antonio Ordóñez. Al día siguiente, el 9 de
julio de 1954, César volvió a cortar dos orejas y rabo al toro “Barconero”,
número 98, de la ganadería de Fermín Bohórquez. Alternó esa tarde con Antonio
Ordóñez y Pedro Martínez “Pedrés”. En esa misma feria, hizo dos paseíllos,
toreó cuatro toros y cortó cinco orejas y dos rabos. Fue una de sus mejores
actuaciones en Pamplona (España).
El 7 de
agosto de 1954, César Girón toreó la corrida de la Asociación de la Prensa en
la Plaza de Toros de Valencia (España) en un mano a mano con el diestro Julio
Aparicio, los toros eran de la ganadería de Murube. El venezolano César Girón,
en su primer astado, recibió las dos orejas y el rabo, dando dos vueltas al
ruedo. En su tercer toro, César Girón fue muy aplaudido y ovacionado, cortó una
oreja y salió por la Puerta Grande a hombros. Ya César había cortado, en el
mismo coso valenciano, el 28 de julio de 1954, tres orejas, un rabo y una pata,
alternando con Antonio Bienvenida y Julio Aparicio. El 26 de septiembre de
1954, cortó una pata en Córdoba (España). César Girón, ocupó el primer lugar
del escalafón en el año 1954, toreando 54 corridas.
César Girón destacando con sus soberbios y magníficos pares de banderillas. Foto: Gonsanhi. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
César Girón tuvo el honor de participar en la primera Corrida Goyesca celebrada en Ronda con motivo del bicentenario del nacimiento del legendario matador de toros Pedro Romero, el 17 de septiembre de 1954, en compañía de Antonio Bienvenida y Cayetano Ordóñez.
De izquierda a derecha: Antonio Bienvenida, César Girón y Cayetano Ordóñez, actuando en la primera Corrida Goyesca realizada en Ronda, el 17 de septiembre de 1954. Foto: Arjona. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 1 de
noviembre de 1954, en la histórica Plaza de Acho en Lima (Perú), César Girón
cortó a su primer toro, las dos orejas y el rabo, y a su segundo toro, las dos
orejas, el rabo y una pata, alternando esa tarde con Antonio Bienvenida y
Rafael Ortega. Los toros eran de la ganadería de Huando. En esa Feria, logró
conquistar el “Escapulario de Oro” del Señor de los Milagros y le tributaron
quizás la máxima ovación de su vida al cortar diez orejas, tres rabos y una
pata en sus cuatro presentaciones, convirtiéndose en un verdadero ídolo de la
afición peruana.
El 5 de
diciembre de 1954, torearon en la Maestranza de Maracay (Venezuela), Luis
Sánchez Olivares "Diamante Negro", César Girón y Carlos Corpas. “Diamante
Negro”, cortó tres orejas. Girón en su segundo toro, corto dos orejas y rabo.
Corpas cumplió. Los tres diestros salieron a hombros por las calles de Maracay.
En febrero de
1955, César Girón tuvo dos grandes tardes en la Maestranza de Maracay. La
primera corrida fue el día 26, cuando realizó una faena memorable, al cortarle
a un toro de la ganadería mexicana de “Rancho Seco”, las dos orejas, el rabo y
las dos patas. César compartió cartel con Antonio Ordóñez y el mexicano Curro
Ortega. Al día siguiente, el 27 de febrero de 1955, César logró con éxito
cortar cuatro orejas, dos rabos y una pata a los toros mexicanos de “San
Mateo”. Alternó esa tarde con Antonio Ordóñez, “Diamante Negro” y Curro Ortega.
Confirmó su
alternativa en Madrid, el 14 de mayo de 1955 de manos de Antonio Bienvenida,
completando el cartel Pedro Martínez “Pedrés”. El toro de su confirmación se
llamó “Bravío”, de la ganadería de Juan Cobaleda. No cortó orejas, pero estuvo
superior a sus alternantes, recibiendo una fuerte ovación en su primero y
palmas en su segundo toro. Como dato curioso, por primera vez, torearon juntos
dos toreros nacidos en Caracas (Venezuela) en la Plaza de Toros Monumental de
Las Ventas de Madrid (España).
SU CONSAGRACIÓN
DEFINITIVA EN MADRID
César Girón en la Monumental de Las Ventas de Madrid. Foto: Martín Santos Yubero. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 20 de
mayo de 1955, César Girón realizó en la Plaza de Las Ventas de Madrid la que
fue considerada la faena de la Feria de San Isidro. A un toro de don Alipio
Pérez Tabernero Sanchón de nombre “Barrabás” con el que se consagró en Madrid
el diestro venezolano. Luego de realizar una apoteósica faena, muy completa,
que culminó con la estocada y la muerte del toro a sus pies sin puntilla, se le
concedieron las dos orejas, saliendo por la Puerta Grande a hombros de la
multitud emocionada. Fue su primera salida a hombros como matador de toros en
Las Ventas. Alternó esa tarde con Rafael Ortega y Emilio Ortuño “Jumillano”.
César Girón,
se convirtió en el primer matador de toros venezolano que cortó orejas en la
Plaza de Las Ventas de Madrid. Anteriormente a César, pero como novillero, el
venezolano Oscar Martínez había cortado la primera oreja en la Plaza de Las
Ventas de Madrid, el 10 de septiembre de
César Girón admirado y aclamado por un grupo de aficionados taurinos de España, quienes lo fueron a recibir con especial cariño. Foto: Cano. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 11 de
septiembre de 1955, en una corrida concurso de ganaderías en Jerez de la
Frontera (España), alternando con Antonio Bienvenida y Rafael Ortega. César
Girón, indultó a su primer enemigo de nombre “Desteñido”, de la ganadería de
Juan Pedro Domecq.
El 14 de
mayo de 1956, en la Plaza Monumental de Las Ventas de Madrid, César Girón salió
a hombros junto a los diestros Antonio Ordóñez y José Ordóñez quien confirmaba
su alternativa. César Girón, en su primer toro, dio una vuelta al ruedo. En su
segundo, perteneciente a la ganadería de doña Eusebia Galache de Cobaleda, la presidencia
le negó concederle la oreja, ante una rotunda protesta del público. Esa tarde,
le hicieron dar a César Girón cuatro clamorosas vueltas al ruedo.
El 7 de junio de 1956, se celebró la Corrida de la Beneficencia, en la Plaza Monumental de Las Ventas de Madrid. Actuó el rejoneador Manuel Conde, ante un toro de Atanasio Fernández, con Antonio Bienvenida, César Girón y Manolo Vázquez, quienes lidiaron toros de Carlos Urquijo. Por primera vez, dos diestros nacidos en Caracas (Venezuela) torearon juntos esta importante corrida. Los diestros cortaron cada uno, una oreja esa tarde.
Dedicatoria a mi abuelo: “Para el gran aficionado y mejor persona Don Florencio Gómez con un fuerte abrazo su amigo que le aprecia”. César Girón. 9 de enero de 1955. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 14 de junio de 1956, César Girón en la Plaza Monumental de Las Ventas de Madrid, cortó dos orejas a su primer toro de la ganadería de don Antonio Pérez de San Fernando. Alternó esa tarde con el rejoneador Manuel Conde y con los diestros Alfonso Merino y Gregorio Sánchez, quien confirmaba alternativa.
El 27 de
septiembre de 1956, ocurrió un acontecimiento histórico taurino de gran
importancia para los venezolanos. César Girón, le otorgó en la Plaza Monumental
de Barcelona (España), la alternativa a sus dos hermanos, Rafael y Francisco
“Curro” Girón. César Girón, había recibido su alternativa en el mismo coso, el
año 1952. Posteriormente, también le otorgó la alternativa, en esa misma plaza,
a su hermano Efraín Girón, el 27 de junio de 1963. En 1956, volvió a quedar
primero en el escalafón, toreando 68 corridas.
César Girón y Antonio Ordóñez, saludan compartiendo cartel en 1957. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 28 de
julio de 1957, se presentaron en la Plaza Monumental de Barcelona (España), los
diestros José María Martorell, César Girón y Gregorio Sánchez, con toros de la
ganadería de Baltasar Ibán. En esta gran corrida se cortaron seis orejas y un
rabo. El venezolano César Girón, le brindó la muerte de su primer toro
“Orgulloso” a la famosa y bella actriz, Ava Gardner. Realizó una faena muy
completa que le valieron las dos orejas, dando dos vueltas al ruedo. A su
segundo enemigo, de nombre “Triunfador”, le cortó una oreja, escuchó una gran
ovación y dio dos vueltas al ruedo.
El 25 de
mayo de 1958, en la feria de San Isidro de Madrid, César Girón, realizó una
magnífica faena al toro “Rosaledo”, Nº 21, de la ganadería de Pablo Romero al
que le cortó las dos orejas, siendo premiado como el toro más bravo de la
feria. César Girón, alternó esa tarde con el rejoneador Josechu Pérez de
Mendoza, Rafael Ortega y Cayetano Ordóñez “Niño de la Palma” (hijo). El
rejoneador y los tres diestros salieron a hombros por la Puerta Grande.
César Girón,
se casó en Marsella (Francia), el 20 de noviembre de 1958, con Danielle Ricard,
la hija del industrial francés Paul Ricard, uno de los hombres más ricos de Francia.
De su unión nacieron tres hijos: Myrna, Patricia y César.
El 26 de
marzo de 1961, en la Plaza Monumental de México, César Girón alcanzó uno de sus
memorables triunfos al cortarle dos orejas y rabo a un toro de la ganadería de
Tequisquiapan, de nombre “Cascarrabias” y a su segundo astado, le cortó las dos
orejas, ganando el premio de la Pluma de Oro en la Corrida de la Prensa
mexicana.
El 26 de
mayo de 1962, César Girón salió a hombros por la Puerta Grande de la Plaza
Monumental de Las Ventas de Madrid al cortar tres orejas; una al primer toro de
la tarde y dos al cuarto toro de la corrida. César Girón, realizó dos faenas de
mucha belleza, estatuarios, naturales y pases circulares, culminando con dos
grandes estocadas, muriendo, sin puntilla, los dos toros que le tocaron en
suerte. Alternó con Curro Romero y Paco Camino.
El 7 de
junio de 1962, participó en la corrida de Beneficencia en compañía del
rejoneador Álvaro Domecq, y los diestro Santiago Martín “El Viti” y Andrés
Vázquez con toros de la ganadería de Samuel Flores. Esa tarde, César Girón fue
el triunfador al cortar una oreja a su primer toro y escuchar ovación en su
segundo dando la vuelta al ruedo.
El 4 de
julio de 1963, César Girón toreó en la Plaza de Las Ventas de Madrid, la
Corrida de la Prensa, alternando con Pedro Martínez “Pedrés”, Curro Girón y
Curro Romero, con toros de don Alipio Pérez-Tabernero Sanchón. César, en su
primero, dio la vuelta al ruedo y en su segundo fue ovacionado, obligándole a
salir al tercio para saludar. Su hermano Curro, cortó una oreja a cada uno de
sus toros.
El 26 de
enero de 1964, en el Nuevo Circo de Caracas, torearon los hermanos Girón,
César, Curro y Efraín, una corrida con ganado mexicano de La Laguna. Fue una
tarde apoteósica; cortaron nueve orejas, dos César, tres Curro y cuatro Efraín.
El público asistente los sacó en hombros por las calles de Caracas.
El 2 de
octubre de 1965, ante siete toros de la ganadería de don Antonio Pérez de San
Fernando de Salamanca y uno del Pizarral de Casatejada, se despidió César Girón
en la Plaza de Toros de Las Ventas de Madrid, alternando con Joaquín Bernadó,
Andrés Hernando y su hermano Efraín Girón. César Girón, al quinto de la tarde,
del Pizarral de Casatejada, le realizó una gran faena, dando unos naturales
estupendos y templados que el público ovacionó fuertemente. Le fueron otorgadas
las dos orejas, su cuadrilla lo abrazó y se le salieron las lágrimas de
emoción. Hernando y su hermano Efraín Girón, le brindaron sus últimos toros esa
tarde. Salió a hombros de la multitud por la calle de Alcalá. El crítico
taurino Antonio Díaz Cañabate, del Diario “ABC” expresó: “¡Adiós César
Girón, si de verdad te vas, nos dejas un recuerdo perdurable. La teoría del
pase natural puesta en belleza! La despedida de un torero. Un adiós por naturales”.
En total,
intervino en tres corridas de la Beneficencia y dos corridas de La Prensa en la
Plaza de Toros de Las Ventas en Madrid. Fue ganador en tres oportunidades del
codiciado trofeo “Manolete”, la más alta distinción en el toreo. Innumerables
triunfos en la Plaza de Toros Monumental de México, uno de ellos, su apoteósica
tarde al cortar cuatro orejas y un rabo, verdaderamente admirable. En Bogotá
(Colombia) cortó cuatro orejas, dos rabos y una pata en una misma tarde. En
Venezuela, logró conquistar varias veces “La Pluma de Oro” del Círculo de
Periodistas Deportivos. Indiscutiblemente con estas credenciales, nuestro César
Girón se ubicó entre las grandes figuras del toreo del siglo XX, a nivel
mundial.
Gran estocada del venezolano César Girón. Foto: Sebastián (hijo). Barcelona. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
El 27 de
marzo 1966, César Girón se retiró de los ruedos en el Nuevo Circo de Caracas
(Venezuela). Se encerró en solitario con seis toros de la ganadería mexicana de
Valparaíso. Su hermano Rafael Girón, fue quien le cortó la coleta. César,
recibió reconocimientos por parte de la afición y condecoraciones como la Orden
“Francisco de Miranda” y la “Medalla de Oro” de la ciudad de Caracas.
César Girón,
reapareció, posteriormente, actuando en algunas corridas como aquella tarde
memorable, el 17 de noviembre de 1968, cuando el público asistente pudo ver la
mejor faena realizada por César Girón en Venezuela. Ocurrió en la Plaza
Portátil de Maracaibo (Edo. Zulia), toreando un mano a mano con Paco Camino. En
el cartel figuró Carlos Martínez Gómez, nieto del General Juan Vicente Gómez,
actuando como sobresaliente. César cortó tres orejas y un rabo lidiando toros
mexicanos de “Reyes Huerta”, ganando el premio del “Escapulario de Oro” en la
Feria de la Virgen de la Chiquinquirá.
César Girón,
fue un torero de raza, dominador y poderoso que no se dejaba ganar la pelea por
nadie. “Antoñete” decía que metía miedo en el patio de cuadrillas, atizando a
sus compañeros de cartel. Luis Miguel Dominguín, señalaba que a veces lo
llamaba y le decía: “Torerillo, te voy a meter un baño que te vas a quedar
más limpio que talón de lavandera. Patas Largas, aquí, allá y donde tú quieras
te voy a dar una felpa que ni las que te daba tu progenitora”. Tenía una
particular forma de realizar el paseíllo con el brazo derecho abierto y
arqueado. Se tapaba el rostro con el capote para no ver la salida de sus toros,
gesto que fue utilizado también por sus hermanos. Gran banderillero. Inventó y
popularizó el pase de “La Girondina”, citando al toro cruzándose con él,
ejecutando un pase circular, trayéndose a su enemigo, nuevamente, en sentido
contrario. Durante sus faenas, siempre estaba interactuando a través de gestos
con el público. Su madre, doña Esperanza, asistía a las plazas a verle torear y
le gritaba que se arrimara mucho más al toro.
César Girón,
salió 5 veces por la Puerta Grande de Las Ventas de Madrid como matador de
toros y 1 como novillero. En la Plaza de Las Ventas de Madrid, toreó en 28
ocasiones (2 novilladas y 26 corridas), lidió 56 reses y cortó 21 orejas. En la
Maestranza de Sevilla toreó un total de once corridas de toros, en cuatro
Ferias (1954, 1955, 1956 y 1968), cortó diez orejas y dos rabos. Intervino en
tres Corridas de Beneficencia (1955, 1956 y 1962) y dos Corridas de la Prensa
(1955 y 1963). En España, toreó un total de 472 corridas, lidió 944 toros,
cortando 758 orejas, 86 rabos y 46 patas. En México, toreó 12 corridas, cortó
16 orejas y 6 rabos. En Colombia, toreó 8 corridas, cortó 16 orejas, 6 rabos y
5 patas. En Lima (Perú), toreó 4 corridas, cortó 10 orejas, 3 rabos y 1 pata.
En Venezuela, toreó 58 corridas, cortó 74 orejas, 10 rabos y 3 patas. También
el gran César Girón actuó en Ecuador, Portugal, Francia y Marruecos
(Casablanca) con bastante éxito.
La tarde de su última corrida, antes de perder la vida en un fatal accidente de tránsito, se celebró, el 26 de junio de 1971, en la Monumental de Valencia (Venezuela), donde alternó con Antonio Bienvenida y Luis Miguel Dominguín. Mi abuelo Florencio estuvo presente aquella tarde en la que César estuvo sensacional, cortando cuatro orejas saliendo a hombros. Nadie se podía imaginar que unos meses después, viajando de Caracas a Maracay, en el kilómetro 73 de la autopista Caracas-Valencia, sufriría un fatal accidente de tránsito que le costaría la vida, aquel triste, 19 de octubre de 1971. César Girón, al parecer, conducía a gran velocidad y se estrelló por detrás contra un camión que se encontraba estacionado al borde de la autopista. Llegó muerto al hospital.
El cuerpo del inolvidable César Girón siendo conducido a hombros por sus hermanos en la Maestranza de Maracay ante las muestras de dolor de su pueblo que acudió a despedirle. Año 1971. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
En
conmemoración de un nuevo aniversario de la trágica muerte de César Girón, el
matador de toros más grande que ha dado Venezuela. ¡Honor, orgullo y gloria a
su memoria maestro!
Rafael Dupouy Gómez