A la izquierda: La sonrisa del
torero, señor Antonio Bienvenida, natural de Caracas y espada de fama mundial,
con actuaciones en todos los ruedos, alternativa en Madrid -hace veintiún años
del acontecimiento- lidiando reses de Miura mano a mano con su hermano Pepe.
Foto: Sardá. A la derecha: La reunión cordial
con Antonio y Ángel Luis Bienvenida en los extremos, con "Diamante
Negro" en el centro y el aficionado Florencio Gómez, desde siempre
admirador del arte de la dinastía Bienvenida. Foto: Sardá. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).
Comparto en esta oportunidad una interesante crónica
taurina de mi querido y recordado amigo el Dr. Pepe Cabello (Q.E.P.D.) sobre
una visita a Caracas, Venezuela, de los hermanos Antonio y Ángel Luis
Bienvenida. Ellos vinieron por el motivo especial de la despedida del ídolo
venezolano del toreo Luis Sánchez Olivares "Diamante Negro", con
quien siempre les unió una entrañable amistad.
A continuación el escrito:
EL TORERISMO APODO
DE LOS "BIENVENIDA" ES EN HONOR DE UN PUEBLITO DE BADAJOZ
(Por: Pepe Cabello)
Allí nació Manuel
Mejías Rapela, fundador de la dinastía. Todos sus hijos
recibieron la alternativa, confirmándola en Madrid. En la actualidad sólo
Antonio y Juanito están activos. Antonio y Ángel Luis en Caracas.
Mientras el otoño se cuela por las calles de Madrid,
rechinando las hojas de los árboles cuando el viento le clava estocadas de
muerte, en Caracas el agua algunas veces interrumpe la lidia del sol, aguijoneando
con sus pinchos. Pero no hay frío y el eterno verde de la campiña, con retazos
sobre la ciudad, permitió la celebración de la corrida el pasado domingo en un
clima agradable. Todo fue perfecto, una tarde emocionante para
llevármela grabada muy adentro.
Habla Antonio Bienvenida. Le gusta este trópico donde
se puede andar en mangas de camisa. Y al recordar ese otoño de los madriles –el
cielo cambia de colores a cada instante- relata con pausa la historia de una
dinastía. Su propio remoquete toreril, nacido en un pueblito de Badajoz.
Forjado en sus comienzos por don Manuel, su padre, y sostenido por sus hijos.
Todos fueron matadores de alternativa, confirmándola en Madrid. Es la gloria de
los "Bienvenida" para sus páginas en la historia. Redactada con caballerosidad
en la calle y con gestos, en el ruedo, frente a los toros.
DON MANUEL TODAVĺA
TORERO CON 78 AÑOS
En la calle General Mola, N° 3, tienen su piso en
Madrid, los padres de los "Bienvenida". Rincones para los recuerdos, con
cuadros de Ruano Llopis, las estatuas de Benlliure y las miles de fotos, con
programas, de don Manuel y sus hijos en sus luchas por los ruedos. Muchas veces
la crónica viajera –en sus reiteradas apariciones en "El Nacional"- publicó
detalles íntimos de ese hogar. Está en el primer piso, tiene atrás una especie
de redondel con burladero para entrenar, es la única casa con autorización
eclesiástica para celebrar misa, en su capilla bellamente adornada, y cuando
alguno de los "Bienvenida" actúa en Madrid es obligatorio vestirse de luces
allí.
-Mi madre con
tantos hijos toreros –señala Antonio- se la pasaba casi todo el tiempo orando,
pidiendo por nosotros. Entonces fue cuando autorizaron que en la capilla se
pudiera celebrar misas.
Por las mañanas –cuerpo juncal, torero en el andar-
sale don Manuel Mejías Rapela a pasear, a charlar a las puertas del café "Galatea". Allí la tertulia obligada, con la presencia del corresponsal
Federico Luceño, que habita en la esquina de enfrente. Y muchas veces el mismo
don Manuel relataba al cronista los trozos de su vida.
-Nací en el pueblo
de Bienvenida, en Badajoz, hace setenta y ocho años, un doce de febrero.
En honor de su patria chica decidió don Manuel usar el
remoquete. Hace algunos meses bautizaron allá una calle con el nombre del
torero, celebrándose un festival y numerosos actos.
Mi alternativa fue en Zaragoza, de manos de "Algabeño".
Era el 14 de octubre de 1905, confirmándola al año
siguiente en Madrid. La campaña de don Manuel subió de tónica en 1910, cuajando
éxitos importantes y acaparando triunfos. Fue cuando el crítico "Don Modesto" se atrevió a forjar una frase.
-A Bombita le
decían, por ser el mejor en la opinión de ese cronista, lo llamaba "Papa de la
torería". Y luego me confirió a mí el título de "Papa Negro"…
Así nació el otro apodo por el cual también se conoce
a Manuel Mejías. Y cuando vino a América se quedó por estas tierras, toreando y
haciendo de empresa. Entonces fue cuando estando en Caracas nació Antonio, un
25 de junio de 1922.
El CARAQUEÑO
ANTONIO BIENVENIDA
Es Antonio el cuarto hijo varón. Desde pequeño sintió
afición por los toreros, actuando de becerrista, tomando la alternativa en
Madrid –esa misma tarde la
confirmaba, de acuerdo con el ritual taurino- el jueves 9 de abril de 1942,
siendo padrino su hermano Pepe, lidiando ambos, mano a mano, un encierro de
Miura.
-No puedo olvidar
ese momento –recuerda ahora Antonio-, siendo el astado de nombre "Cabileño" con el
número setenta y cinco y cárdeno de pelo…
Después de ese momento, armado caballero en el ruedo,
salió Antonio por el mundo a pregonar su arte. Cornadas y triunfos. En todas
las primeras plazas del mundo, sin excepción de ninguna, figuró el nombre de
Antonio. En México estuvo al reanudarse el Convenio –al lado de Pepe Luis
Vázquez, "Gitanillo de Triana" y "Gallito"-, para posteriormente ganarse en
Lima el Escapulario del Señor de los Milagros. En Colombia es difícil contar
las presentaciones de Antonio, dándose el caso de ser de Caracas donde menos ha
venido. Esta es su cuarta visita habiéndose representado por "Morenito de
Valencia" al debutar en el Nuevo Circo.
-De este año puedo
destacar mi éxito en Madrid, cortando 3 orejas –responde Bienvenida, cuando se le pide deje a un lado su habitual
modestia- pero también en Valencia, en la
corrida del Montepío de toreros, me sentí a gusto con el primero obteniendo
apéndice…
No quiere Antonio Bienvenida destacar que fue padrino
de "El Cordobés", cuando le cediera los trastos en Córdoba y que en todas
partes, a la hora de un acontecimiento, su nombre es necesario. Para darle
señorío, categoría, al espectáculo.
-Este miércoles, a
las cinco de la tarde, salimos para Madrid.
El humo del cigarrillo también torea en sus manos.
Premiado con la Cruz
de Beneficencia, uno de los mejores Presidentes que tuvo el Montepío de Toreros,
es Antonio Mejías Jiménez "Bienvenida" un nombre de historial, para figurar con
honor siempre. Y cuando es necesario hacer su biografía, recordar sus hazañas,
el punto de partida es Caracas, donde nació.
ÁNGEL LUIS ES AHORA
APODERADO
Con Antonio vino a Venezuela, llegaron el domingo en la mañana, su
hermano Ángel Luis, que retirado de los ruedos se ocupa de negocios taurinos. Se puede decir que es el apoderado de la simpatía, certero en sus gestiones.
-En esta temporada
llevo a Antonio y a Juanito, así como a José María Clavel.
En México se presentó Juanito –aquí toreó una vez en
Maracaibo, en el estadio de béisbol y también en el Nuevo Circo-, pero luego
sufrió una enfermedad en los huesos que le cortó la campaña hispana. Por su
parte Clavel, según relata Ángel Luis, empezó muy bien en Madrid, manteniendo
su cartel en todas las plazas.
-Considero que en
Caracas puede gustar mucho, pues es excelente en todos los tercios y con las
banderillas fenomenal. En Cali fue herido el año pasado, es un ídolo en
Colombia…
Ángel Luis mueve mucho las manos al charlar. El mismo
perfil de sus hermanos –nariz aguileña, color blanco y pelo rubio- para eludir
siempre en la conversación sus hazañas. El 11 de Mayo de 1944 tomaba la
alternativa en Madrid y sobre esa fecha señala Ángel Luis:
-Lidiamos reses de
Cobaleda siendo mi hermano Pepe, el padrino de la ceremonia y Antonio el
testigo. Fue la primera vez en la historia del toreo que actuaban juntos tres
hermanos en una corrida como matadores de toros…
Posteriormente Ángel Luis se dedicó a negocios,
fijando residencia en Colombia donde trabajaba en asuntos relacionados con
madera. Dejaba, en su historial taurino, un estilo personal. Y fue uno de los
primeros en dar muletazos mirando al tendido, suscitándose interesantes
polémicas cuando algunos pretendieron asegurar que "Manolete" había sido el
inventor de esa modalidad. Los periódicos sacaron a relucir una foto de Ángel
Luis, en la plaza de Barcelona, que fue la prueba rotunda y que puso punto
final a las discusiones.
-Todo eso es tiempo
pasado ahora soy apoderado y en los ratos de ocio me dedico a estar en mi
hogar, con mi señora.
Ángel Luis seguía moviendo las manos. Intercalando
sonrisas y recuerdos.
JUANITO Y PEPE LOS
OTROS HERMANOS
En la flor de su juventud, cuando estaba en la cima de
la torería, murió Manolo Bienvenida, el hijo mayor de don Manuel. Fue una
verdadera figura, en su época, brillando con luz propia al iniciar la fama de
la dinastía "Bienvenida". A los diez y seis años recibía la alternativa en
Zaragoza, cortando orejas. ¡Algo sensacional e increíble! Y el nombre de
Manolito, la sonrisa en reto al peligro, es como una leyenda para comentar con
nostalgia.
Quedaban entonces Pepe, Antonio, Ángel Luis y Juanito.
El mayor, cariñosamente le dicen "Pepote", supo sostener con orgullo y fama el
prestigio de la casa. Nunca en su vida fue corneado –único caso habiendo actuado
tantas corridas- siendo la figura central cuando la competencia "Manolete" y
Arruza estaba a punto de comenzar. Fue Pepe la chispa que encendió esa
rivalidad, forjando en todos los sitios trasteos magistrales. De esa forma, no
pueden olvidarlo los verdaderos aficionados, se retiraba sin cortarse la
coleta. Uno de los mejores banderilleros de todos los tiempos. Pepe Bienvenida
toreaba excelentemente de capa y muleta. Supo seguir, frente a los bureles, el
sendero marcado por los dos Manolos. Su padre y su hermano.
En Juanito se reunieron todas las calamidades, la mala
suerte. Padecimientos físicos –ahora la afección de los huesos- le impidieron
colocarse en sitial de honor, que por sus méritos era acreedor. En Barcelona, el
venezolano César Girón le dio la alternativa y luego confirmó en Madrid. Está
casado, viviendo en Madrid, en la misma calle General Mola, pero varias calles
distante del hogar paterno.
Esta tarde, a la cinco, viajan rumbo a Madrid los
hermanos Antonio y Ángel Luis Bienvenida. Vinieron a Venezuela para la despedida del
"Diamante Negro". Sobre el particular la pregunta es obligatoria. Y
la respuesta no se hace esperar:
-No he pensado
retirarme de los toros, esa es mi vida, mi mayor afición.
Con veintiún años de alternativa Antonio Bienvenida
entrena todas las mañanas, acude a tentaderos y se presenta en festivales
benéficos. Dada su categoría, viste de luces en contadas oportunidades, pero
manteniendo todos los años número suficiente de festejos.
-A Caracas vendré
otra vez, para llevarme las orejas y decir adiós! Eso sí, no sé cuándo tome esa
determinación, la más difícil de mi vida!
Por primera vez el rostro de Antonio y Ángel Luis está
huérfano de sonrisas. La pareja, los hermanos "Bienvenida", no
quieren hablar de despedidas. Es un hasta luego. Aquí, en Madrid, en cualquier
parte del mundo. Con el señorío sobre el tapete, la simpatía en el corazón.
PEPE CABELLO.
(Publicado en el
Diario "El Nacional", el 2 de octubre de 1963).
GRACIAS,RAFAEL, NUEVAMENTE POR TU GENTILEZA AL ENVIARME TUS SABROSA CRONICAS, AUN CUANDO ESTA LA HIZO NUESTRO COMUN Y RECORDADO AMIGO PEPE(+). tE FELICITO DE MANERA REITERADA POR TU AFICION Y ME PRECIO DE TU AMISTAD.ABRAZOS A TU MAMA Y HERMANO .MANUEL QUINTERO PRINCE
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